La factoría de Ford Almussafes estará paralizada del 1 al 8 de marzo al reorganizar la dirección de la compañía el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) previsto durante el primer cuatrimestre de 2021. El nuevo plan de la empresa, que tiene que ver con la caída de ventas por el impacto de la pandemia y la falta de suministro de componentes electrónicos, hará coincidir la parada en la planta de motores con la parada en las de fabricación de vehículos).

Así lo ha acordado la comisión mixta de seguimiento del ERTE de Ford, que señala que la evolución de la crisis de la covid-19 está afectando a todos los mercados y la planta de motores se está viendo doblemente perjudicada. De este modo, el parón que había previsto en la planta de motores (incluido mecanizados) del 23 al 30 de marzo se traslada a la primera semana de marzo, del 1 al 8 de mismo mes, y se alinea con la parada de vehículos.

La dirección de Ford Almussafes había acordado el pasado 27 de enero con UGT, sindicato mayoritario, un ERTE para toda la plantilla de 14 días completos en las plantas de fabricación de vehículos -entre febrero, marzo y abril- y de 9 días en la planta de motores (incluido mecanizados) -entre marzo y abril-. Por otro lado, hay 600 personas afectadas de forma rotativa el resto de días laborales en febrero y marzo, puesto que se acordó parar el Sistema A de producción y trabajar únicamente en el turno de mañana.

En un principio, la marca del óvalo planteó el ERTE en la planta de vehículos los días 1, 2, 3, 4, 5, 8, 15 y 22 de febrero; 1, 8, 18, 22 y 26 de marzo; y el 1 de abril, con la previsión de reducir la fabricación diaria de 1.600 a 1.300 vehículos, esto es, unos 13.500 coches en total. Para motores, los días planteados eran el 22, 23, 24, 25, 26, 29, 30 y 31 de marzo, además del 1 de abril.

Según se ha expuesto en la reunión, la evolución de la crisis de la covid-19 nivel global y sus consecuencias sobre la cadena de suministros y componentes está afectando a todos los mercados. «La planta de motores se ve doblemente afectada. Por un lado debido a la falta de algunos componentes necesarios para su propio proceso productivo. Por otro, la falta de componentes electrónicos en alguna de nuestras plantas clientes han determinado una importante bajada en el número de vehículos que pueden fabricar y por tanto en sus pedidos de motores», indica el citado escrito.

El presidente del comité de empresa, Carlos Faubel, de UGT-PV, lamenta que «casi un año después del inicio de la pandemia, estamos igual, se repite la misma foto». En declaraciones a Europa Press, Faubel ha recordado así el parón de siete semanas en Ford Almussafes entre marzo y mayo del año pasado, cuando estalló la crisis sanitaria de la covid-19.

Sudáfrica despierta el interés de empresas auxiliares del automóvil de la C. Valenciana

El mercado sudafricano del automóvil despierta el interés de las empresas de la Comunitat Valenciana de fabricación de componentes. Es el caso de MBHA, Muelles y Ballestar Hispano-Alemanas, con sede en Vila-real. Esta firma forma parte de la misión comercial de 2021 organizada por la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto), en la que están participando otras empresas españolas como Ajusa, Autocomercial Monedero, CRUZBER, IADA, Industrial Metalcaucho, MRF Solutions y Sadeca, entre otras. El mercado sudafricano supone una gran oportunidad para las empresas españolas de automoción ya que ha aumentado su producción de vehículos en los últimos años. En 2019 se lograron alcanzar los 631.983 vehículos, un aumento del 3,5% respecto al año anterior, situándose como el principal país productor de este continente. Esta misión cuenta con la colaboración de ICEX España Exportación e Inversiones. «Desde hace algún tiempo iniciamos nuestros planes de expansión mundial de la firma y países como Sudáfrica forman parte de los proyectos de la compañía», destaca Marcus Schlichtmann, director de ventas de MBH».