El Ayuntamiento de València ha aprobado este viernes, en la Junta de Gobierno Local, el convenio para ceder a la Generalitat la titularidad de la concesión de Feria Valencia, un trámite que se hace mediante el sistema de mutación demanial subjetiva gratuita y sin quebranto económico para el consistorio. El visto bueno a este convenio entre la administración municipal y la autonómica para hacer efectiva dicha cesión supone que la Generalitat mantendrá los usos feriales y se ocupará de los terrenos, instalaciones y edificios de Feria Valencia por un período de 50 años.

El alcalde de la capital valenciana, Joan Ribó, ha manifestado tras la aprobación del convenio su satisfacción porque esta medida representa "un paso decisivo para hacer una feria que vuelva a funcionar" y que "supere los grandes déficits y las carencias que nos encontramos". Así, ha valorado que pueda volver "a ser un elemento fundamental para la economía valenciana". "El anterior gobierno nos dejó una deuda de cerca de 1.000 millones de euros, que no es cualquier cosa" en Feria de Valencia, ha destacado el primer edil. En esta línea, ha expuesto que "como consecuencia de los graves déficits y las graves carencias que nos encontramos, la Feria había perdido su fuerza en los últimos años".

Joan Ribó ha insistido en que el convenio con la Generalitat "es un paso decisivo para hacer una Feria que vuelva a funcionar, que vuelva a ser lo que siempre había querido ser, un elemento fundamental para la economía valenciana". Asimismo, el responsable municipal ha explicado que "los municipios, como València, perdieron en 2010-2011 la capacidad de tener ferias, una competencia que ha pasado a la Generalitat" y ha dicho que "esto exigía un cambio jurídico de la estructura" de la entidad ferial.

Ribó ha señalado que "la concesión tendrá el mismo plazo concesional que tenía hasta ahora y las mismas condiciones". "Lo que hacemos es cambiar la concesión desde la Feria a la Generalitat porque, en definitiva, es la que tiene la competencia", ha agregado. A partir de este acuerdo, la Generalitat explotará la concesión de Feria Valencia durante el mismo período de tiempo recogido en el convenio que el Ayuntamiento de la ciudad tenía ya subscrito con la entidad ferial y que data de 2001.

El gobierno autonómico tendrá la concesión con los mismos derechos y obligaciones que hasta ahora tenía el consistorio. Entre las obligaciones figura el mantenimiento de la actividad ferial y de los edificios, sedes y terrenos en buen uso. El convenio contempla la creación de una comisión de seguimiento, constituida por tres representantes de la administración municipal y tres de la autonómica, que se reunirá en caso de que se detecten discrepancias. En el supuesto de que la Generalitat incumpliera total o parcialmente los puntos del acuerdo, el Ayuntamiento recuperaría la titularidad del recinto, así como todos sus bienes, inmuebles y terrenos. El ejecutivo autonómico no podrá establecer ninguna modificación del régimen jurídico de la institución ferial sin previa autorización del consistorio.

Por parte del gobierno valenciano, el conseller de Hacienda, Vicent Soler, ha garantizado que el pleno del Consell aprobará próximamente el traspaso, después de que lo haya hecho el Ayuntamiento, y ha garantizado que actuará "en consecuencia", asumiendo la deuda en las condiciones pactadas. "Estoy muy contento, hemos dado un paso histórico que viene de muy lejos", ha dicho en la rueda de prensa tras el pleno del Consell.

Es más, ha insistido en que esta "broma" dejó un agujero de 1.000 millones en la época del anterior gobierno del PP, por lo que en este partido "deberían estar un poco callados", ha agregado. Asimismo, el conseller ha resaltado que 500 millones ya están "prácticamente pagados" y que el resto se hará en los próximos años, además de recordar que es un proceso muy complicado porque "el 31 de marzo podía producirse una disolución del ente".

Vicent Soler ha hecho hincapié en que trabajarán para que no suceda y para que Feria Valencia esté "en las mejores condiciones posibles", para lo que ha dicho que debería estar a cargo de una empresa pública. "Apostamos por que sea uno de los grandes elementos del futuro de la Comunitat, conscientes de que el negocio ferial puede cambiar muchísimo en los próximos años", ha augurado, recordando que Madrid y Barcelona apuestan por sus ferias y que ahora le toca a la de València.

Preguntado por la situación financiera, ante la reunión del comité ejecutivo de la Feria del próximo lunes, ha reconocido que la Generalitat "obviamente" se tiene que hacer cargo y "ya ha avanzado un millón en las últimas semanas, el límite permitido". En todo caso, ha puntualizado que es "una situación muy delicada jurídicamente porque la UE está mirando con lupa todas estas operaciones". "Hacemos todo lo que podemos hacer. Hasta que no sea un medio propio de la Generalitat tendremos que ir con pies de plomo para no crear un situación peor ante Bruselas", ha prevenido, y ha recordado que el patronato tiene tres socios y "es evidente que todo ha caído sobre las espaldas de la Generalitat, el convenio que en su momento firmó Rita Barberá", exalcaldesa con el PP.

También la vicepresidenta portavoz, Mónica Oltra, ha destacado el traspaso definitivo de Feria Valencia, algo que ve extraordinario porque "arregla un empastre de ruina en diferido que dejó el PP" en el anterior gobierno, "un agujero de mil millones del que se ha liquidado más de la mitad". "Hoy se ha sentado una piedra muy importante para la normalización de la Feria y para que sirva a lo que realmente tiene que servir: apoyar a los sectores productivos valencianos", ha proclamado la también líder de Compromís en su comparecencia semanal, preguntada por la situación límite de la institución.Id: