Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

TiL-MSC reclama a Valenciaport adjudicar la nueva terminal tras aceptar las modificaciones

Directivos de la naviera y el presidente de la Autoridad Portuaria, Aurelio Martínez, analizan los planes de ejecución del proyecto, que no podrá adjudicarse en el consejo de la semana que viene

Reunión de un consejo de administración de la Autoridad Portuaria de València, en una imagen de 2020. | LEVANTE-EMV

El presidente de la Autoridad Portuaria de València (APV), Aurelio Martínez, mantuvo ayer un encuentro con directivos de la TiL-MSC, la operadora de infraestructuras marítimas participada por la naviera Mediterranean Shipping Company, para analizar el proceso de otorgamiento de la nueva terminal de contenedores que se quiere construir en la ampliación norte del emplazamiento del Grao. Las conversaciones entre ambas partes se producen en vísperas del consejo de administración de Valenciaport, que se celebrará el próximo 30 de abril.

Con todo, la APV descarta resolver la adjudicación definitiva de la citada terminal de contenedores a TiL-MSC en dicha reunión del máximo órgano de gobierno de Valenciaport porque antes tendrá que resolver la determinación de Puertos del Estado (Ministerio de Transportes) sobre este asunto. Como se recordará, la entidad presidida por Francisco Toledo determinó a principios de abril que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), concedida en 2007 sigue vigente, si bien puntualizó que Valenciaport es la encargada de determinar la necesidad o no de realizar una nueva evaluación a la vista de los cambios introducidos en el anteproyecto constructivo de la nueva megaterminal de contenedores, que tendrá 136 hectáreas de superficie y una capacidad para albergar 5 millones de contenedores de veinte pies (es decir, de un TEU).

Medio ambiente

Además, el Ministerio para la Transición Ecológica, indica que el proyecto presenta modificaciones apreciables respecto del que obtuvo la declaración de impacto ambiental en 2007. Por eso, recuerda a la APV que según la Ley de Evaluación Ambiental 21/2013 «deberán someterse a evaluación ambiental simplificada las modificaciones de proyectos ya autorizados, ejecutados o en proceso de ejecución, cuando puedan tener efectos adversos significativos sobre el medio ambiente». Y enumera los seis supuestos que contempla la ley: aumento de emisiones, de vertidos, de generación de residuos, de utilización de recursos naturales, afección a espacios protegidos o del patrimonio cultural.

Sea como fuere, el Puerto de València, sostiene que la ampliación no provoca ninguno de estos supuestos y defiende que es precisamente lo que acredita la DIA de 2007, por lo que rechazo elaborar otro estudio. Por su parte, la multinacional TiL-MSC admitió en último consejo de administración, celebrado el pasado miércoles, que el proyecto «sigue adelante». El alcalde de València, Joan Ribó, consejero de la APV, aprovechará el próximo consejo de administración de la entidad presidida por Aurelio Martínez para solicitar una nueva evaluación ambiental.

Debate político

El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha tratado esta semana de amortiguar las críticas de Compromís y Unides Podem a la ampliación del Puerto de València con una serie de medidas para preservar el litoral y su adaptación al cambio climático. El jefe del Consell anunció en las Corts un plan para proteger el litoral de 50 millones de euros (Valenciaport aportará 15 millones) y la aportación del Puerto de València a varios proyectos de la ciudad, como la línea de metro de Nazaret y el parque de desmbocadura del río Túria.

Eficiencia energética

Respecto a la eficiencia energética la Autoridad Portuaria de València anunció ayer que tiene previsto reducir un 23% el consumo energético de sus edificios. Para ello ha licitado el proyecto de la mejora de la eficiencia energética de la planta de climatización de sus oficinas administrativas.

El pan de empresa de Valenciaport para los próximos años recoge actuaciones para fomentar la energía verde y la reducción de gasto energético en el marco del Valenciaport 2030, cero emisiones. Así, se van a invertir en programas de eficiencia energética y sistemas de control de consumos 3,2 millones de euros, mientras que en la generación de energías alternativas hay previstos 15 millones de euros para la generación eólica y 2,8 millones para sistemas de generación fotovoltaica.

Compartir el artículo

stats