Fumata blanca en los ERTE de la covid. El Gobierno, la patronal y los sindicatos cerraron ayer un acuerdo para prorrogarlos hasta el 30 de septiembre. Los empresarios ratificaron en junta directiva el contenido del acuerdo y los sindicatos hicieron lo propio. El Ejecutivo salva así los escollos con los agentes sociales y hoy un consejo de ministros extraordinario aprobará una nueva renovación que cubre toda la campaña de verano y da seguridad a los 600.000 trabajadores que actualmente están en un expediente de este tipo.

Finalmente el ministro José Luís Escrivá consiguió convencer a la patronal de incorporar incentivos para las empresas que reactiven a trabajadores en ERTE, a costa de mejorar ostensiblemente sus últimas ofertas. El quid de la negociación ha estado desde hace una semana en cuánto dinero los empresarios dejan de pagarle a la Seguridad Social por sus trabajadores en ERTE.

Finalmente, según explican fuentes conocedoras de las conversaciones, las empresas de los sectores especialmente protegidos (CNAE) que tengan menos de 50 empleados podrán dejar de pagar el 95 % de las cotizaciones de los trabajadores que salgan del ERTE (de junio a septiembre) y el 85 % para los que permanezcan en suspensión hasta agosto y el 70 % en septiembre. Por otro lado, si la empresa tiene más de 50 trabajadores dejará de pagar el 85 % de las cotizaciones (de junio a septiembre) de aquellos trabajadores que salgan del ERTE. Y para los que se quedan, dejará de pagar el 75 % entre junio y agosto y en septiembre el 60 %.

En el caso de los ERTE por limitación, es decir, aquellos a los que recurre una empresa por tener parte de su actividad limitada (ejemplo: un bar con limitación de aforo), las exoneraciones no establecen distinciones y quedan de la siguiente manera: las empresas de menos de 50 empleados podrán descontarse el 85 % durante junio y julio y el 75 % durante agosto y septiembre. Mientras que las compañías de mayor tamaño, podrán descontarse el 75 % durante junio y julio y el 65 % durante agosto y septiembre.