El fin del confinamiento perimetral tras el levantamiento del estado de alarma a principios de mayo ha disparado las ventas de casas a extranjeros en la Comunitat Valenciana. Las transacciones han repuntado con fuerza en la provincia de Valencia y en la Costa Blanca tras el desplome del 30 % registrado el año pasado. Las inmobiliarias aseguran que las operaciones del mercado internacional superarán a final de año a las de antes de la pandemia en 2019. Belgas, franceses y holandeses copan las compras internacionales. El mercado extranjero es fundamental para el sector inmobiliario valenciano.
Roberto Botella, director de Engel & Völkers en Alicante, asegura que desde principios de mayo se ha reactivado el mercado internacional tras unos primeros meses del año complicados por las restricciones para viajar a España y el cierre perimetral de la Comunitat Valenciana. «Nosotros desde el fin del confinamiento perimetral tenemos un repunte muy importante de compras de belgas, franceses, holandeses y suizos en Alicante. Buscan propiedades unifamiliares con piscina y vistas al mar. Son inmuebles que cuestan de 750.000 euros para arriba», puntualiza Roberto Botella.
Cristina Recasens, directora de Recasens Real Estate, explica que la situación en València y su área metropolitana es muy parecida. «En invierno el mercado extranjero estuvo parado, pero desde mayo no paramos. Tenemos clientes suizos, irlandeses, alemanes, estadounidenses, ingleses y del norte de Europa. Su prioridad es encontrar una vivienda cerca de la playa», indica Recasens.
El director de CBRE en la Comunitat Valenciana, José Ángel Sospedra, subraya que el mercado internacional «ha despertado con fuerza. En las últimas cuatro semanas se ha producido un acelerón, aunque hay que tener en cuenta que prácticamente veníamos de cero tras un invierno duro. Lo hemos notado en Valencia y sobre todo en Alicante. Los promotores de la Costa Blanca también nos lo han trasladado».
El responsable de Engel & Völkers en Alicante señala que algunas visitas se han adelantado por videoconferencia y «han viajado en cuanto han podido para hacer la reserva. Al ritmo al que vamos, cerraremos el año con un porcentaje de ventas un 20 % o un 25 % por encima de las de 2020. Alicante está funcionando muy bien. Ahora mismo, el 60 % de nuestras ventas son a extranjeros».
El año pasado, los foráneos compraron 46.303 viviendas en España, lo que supuso un retroceso del 26,3 % respecto a 2019. Del total de compraventas internacionales registradas en España el año pasado, la Comunitat Valenciana lideró el mercado con 13.493 transacciones, lo que supuso un descenso del 30,3 % respecto a 2019. Le siguieron Andalucía con 9.443 compras (un 22,7 % menos en la tasa interanual) y Cataluña con 7.748 operaciones (un retroceso del 20,7 %), según datos de un informe elaborado por Gamerin para los Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) y Fiabci España (una de las federaciones más destacadas del mercado inmobiliario). El estudio recoge que en la Comunitat Valenciana las operaciones de los extranjeros supusieron el año pasado el 23,34 % del total.
Cristina Recasens afirma que los extranjeros que compran en València y su área metropolitana para invertir en activos que después destinan al alquiler se gastan de media 200.000 euros y los que buscan un inmueble para quedarse a vivir tienen un presupuesto de 400.000 euros. «Tenemos clientes que trabajan en remoto y han decidido instalarse en València por el buen clima y la calidad de vida de la ciudad, y extranjeros más mayores que se trasladan tras jubilarse», destaca la consultora inmobiliaria.
