Ford España sigue los pasos del resto de fábricas del automóvil de Europa y de medio mundo y también reducirá su capacidad de producción durante el tercer trimestre de 2021. Entonces realizará un nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) entre el 1 de julio y el 30 de septiembre que afectará tanto a las plantas de montaje de vehículos como a la de motores. Así lo anunció ayer la dirección de la multinacional del óvalo azul a los representantes de los sindicatos en la comisión consultiva convocada para analizar la situación de la compañía.
La crisis persistente por la falta de semiconductores y la caída de la demanda en Europa, el principal mercado de la fábrica valenciana, obligan a Ford a negociar un nuevo ERTE cuando el actual está vigente hasta el 30 de junio. Según fuentes de UGT y STM-Intersindical, la empresa aún no ha concretado el alcance de este expediente sobre la plantilla, si bien todo parece indicar que afectará a la gran mayoría de la fábrica del automóvil de Almussafes -formada por unos 7.000 trabajadores- y, por ahora, conllevará paralizar la producción del 12 al 16 de julio, con un paro total los días 14 y 15.
El secretario de la sección sindical UGT-Ford y presidente del comité de empresa, Carlos Faubel, lamenta «la losa de esta crisis» que está afectando a Ford en toda Europa, con las plantas alemanas y rumanas paradas durante semanas. STM-Intersindical, que rechaza el nuevo ERTE, critica la decisión de la dirección de Ford «porque la plantilla ya acumula demasiado tiempo perdiendo un 20 % de su salario, con lo que eso supone para sus economías domésticas», afirma la central liderada por Paco González.
En la próxima reunión de la comisión consultiva de Ford España, que se celebra mañana, se concretarán los días de paro, el nivel de impacto en motores y en vehículos y las condiciones para los trabajadores. En principio deben ser las mismas que los expedientes anteriores. Según UGT, la única parte positiva es que se recupera la actividad de la planta de carrocerías donde se fabrica la furgoneta Transit. Almussafes produce también los modelos Kuga (este acapara más del 50 % de su producción), así como el Mondeo, Galaxy y S-Max. A partir de finales de 2022 la planta de motores de Valencia fabricará el motor híbrido Duratec de 2,5 litros para Europa.
El ERTE se aplicará de manera rotatoria al personal y todo parece indicar que en julio tampoco se recuperará el turno de trabajo de noche (perdido desde principios de este año). El actual ERTE se llevará por delante la fabricación de más de 30.000 vehículos, un 10 % de la producción total de la planta valenciana de 2019. Es el séptimo que sufre la plantilla de Almussafes desde el inicio de la pandemia. Además, a principios de mayo Ford presentó un plan de despidos para 630 trabajadores de la empresa.
La crisis de los chips afecta de lleno a otras plantas españolas. Volkswagen Navarra para hoy y mañana, a lo que se unirá el cierre programado de la fábrica el 25. Desde ayer y hasta el viernes próximo la planta de Mercedes-Benz en Vitoria cesará tres turnos de producción. Mientras, Citroën, Peugeot, Opel, DS, Fiat, Alfa Romeo y Jeep ya aplicaron a primeros de junio suspensiones en la producción en su planta de Vigo.
