Bautista Soler Crespo (Turís, 1929) falleció ayer domingo a los 92 años tras una larga enfermedad. Soler fue uno de los nombres de referencia en el sector inmobiliario de la Comunitat Valenciana. Comenzó a mediados de la década de los años cincuenta a ejercer de lo que entonces se conocía como corredor de fincas y poco a poco fue creando un importante grupo inmobiliario en Valencia. En 2007 fue incluído entre los hombres más ricos del planeta, según la revista ‘Forbes’, que valoraba su fortuna en 1.400 millones de dólares tras su entrada en el grupo Metrovacesa.

En los años ochenta inició una andadura dedicada a adquirir salas de cine en Madrid, incluyendo el Palacio de la Música y los teatros Coliseum y Lope de Vega. Media Gran Vía madrileña era suya. En València impulsó los cines Lys. Sin olvidar sus costumbres, como la de bajar al bar Tokio, en la calle Cirilo Amorós de València, para llevarse el bocadillo al tren.

En cuanto al negocio de la vivienda, no se puede entender el crecimiento de algunas ciudades como Alzira y de Valencia, desde los años 60, sin su contribución. La fisonomía de avenidas como las de Aragón o Manuel Candela, o calles como Justo y Pastor, Salamanca o Centelles, está ligada a Soler. Sin olvidar la transformación de La Patacona, en Alboraia, donde la crisis inmobiliaria de 2008 le obligó a frenar en seco la construcción de centenares de viviendas.

A primeros de siglo se convirtió para una parte del valencianismo en la posible solución al colapso social que atravesaba la sociedad, cuando Francisco Roig intentó asaltar la propiedad del club. Se convirtió en su contrapeso, adquiriendo acciones al inaudito precio de 600 euros (su precio inicial fue de 48) a través de un sindicato en el que él llevaba el peso del desembolso. El futuro de la entidad quedó como un duelo entre ambos a la espera de quien cedería y acabaría vendiendo su paquete accionarial. En 2004 se firmó el acuerdo: la familia Soler pasaba a tener el control accionarial de la entidad y la presidencia pasaba a su hijo, Juan Bautista Soler.

Viudo de Loli Luján, en 2007 contrajo segundas nupcias con Dori González.

En 2016 el ayuntamiento de Turís rotuló a su nombre la avenida principal de la población. Va en consonancia con las grandes obras que ha realizado Bautista Soler a lo largo de los años en beneficio de todos los turisanos como la finalización del campanario de la iglesia y la reforma de su altar mayor devolviéndolo a su estado original, los accesos al cementerio y su capilla, el conservatorio Lola Luján y el Hogar de los niños, como obras más importantes.

La misa funeral tendrá lugar este lunes a las 13.00 horas en la parroquia de la Natividad de Nuestra Señora, de Turís.