Tras casi un año de pleitos, laBolsa de València consumó ayer su salida del centrico palacio de la capital que usaba como sede desde que hace tres décadas se lo cedió la Generalitat. La conselleria de Hacienda rompió el pasado noviembre el convenio con BME, la gestora de los mercados de valores españoles ahora propiedad de la suiza SIX, y ayer su titular, Vicent Soler, mostró su «satisfacción» tras la firma del acta de entrega y recepción del derecho de uso gratuito del Palau dels Boïl d’Arenós, que «permite recuperarlo para el patrimonio valenciano».
La ruptura se produjo al constatar Hacienda que BME en realidad operaba de forma virtual desde València y no estaba dispuesta a compartir gastos por el uso del inmueble, aunque sí obtenía ingresos por actos que organizaba en el mismo. BME ha trasladado la sede de la Bolsa de València a un inmueble propiedad de una de sus filiales que se encuentra ubicado en la calle Pintor Sorolla de la capital autonómica.
A partir de ahora, el conjunto patrimonial acogerá dependencias de la Generalitat al convertirse en las próximas semanas en la sede del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), al tiempo que seguirá albergando la sede de la Fundación de Estudios Bursátiles. Además, dentro de la iniciativa Palaus Transparents, el objetivo del Consell es abrirlo a la ciudadanía para que pueda ser visitable. Soler recordó, a través de un comunicado, que a nivel legal «se ha ejecutado la decisión del Consell de resolución del convenio y de desalojo del edificio tras confirmar que ya no se destinaba a los usos para los cuales fue cedido»
