La creciente preocupación por la subida del precio de la luz y su potencial impacto llega este lunes a la mesa del Eurogrupo. Son varios los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro, empezando por la vicepresidenta española Nadia Calviño, los que han lanzado la voz de alarma ante una imparable subida que tiene el potencial de ralentizar la recuperación económica, de aumentar la pobreza energética de los hogares y de desbocar la inflación. “El actual aumento de los precios de la energía ya está impactando en las economías y es necesario discutir el impacto de precios más elevados en los presupuestos nacionales”, señala un breve análisis preparado para la reunión del Eurogrupo de este lunes.

El documento preparado por los técnicos del Eurogrupo reconoce que desde el punto de vista económico, “la subida de los precios de la energía -un elemento importante a la hora de preparar los planes presupuestarios- tiene el potencial de ralentizar la recuperación”, que existe el riesgo de que tenga “un impacto desproporcionado en los grupos con ingresos más bajos y las personas más mayores, que es particularmente preocupante en los meses de invierno”, y que si el incremento de los precios se mantiene en el tiempo tendrá mayores consecuencias para el crecimiento y la inflación dado que precios de la energía más elevados afectarán a las cadenas de suministro, los márgenes de beneficios y podrían terminar afectando a los precios de los consumidores y las negociaciones salariales.

“Un intercambio de opiniones sobre la reciente evolución y las mejores prácticas en términos de respuesta política, incluidas las áreas potenciales de acuerdo podría ser beneficios en esta fase de preparación presupuestaria”, señala el informe. Aunque fuentes del ministerio de Economía español admiten que no esperan “conclusiones operativas a corto plazo”, sí inciden en que la inclusión del tema de la energía en la agenda “es fundamental” y será algo “recurrente” a partir de ahora dado que “son muchas aristas las que impactan en este tema y todas con un componente europeo”. Además de España, que reclama la creación de una plataforma europea de compra de gas, una reforma del mercado eléctrico y medidas para combatir la especulación en el mercado de CO2, también han presentado propuestas a Bruselas para combatir la escala de precios otros países como Grecia o Polonia

Preocupación general

Atenas propone crear un fondo para financiar el gasto energético con los ingresos del sistema europeo de comercio de emisiones de CO2. Según sus estimaciones, las necesidades financieras relacionadas con la energía este próximo invierno serán de entre 5.000 y 8.000 millones de euros. El dinero se repartiría proporcionalmente entre los Estados miembros teniendo en cuenta el consumo energético y el PIB. Varsovia por su parte aprovecha la escalada de precios para poner en duda alguna de las propuestas del paquete 'Fit for 55', como la extensión del sistema de comercio de emisiones a edificios y transporte. Francia, por su parte, considera que la solución pasa por desvincular los precios del gas y la electricidad porque es “a la vez absurdo económicamente e injusto para las familias”, advertía hace unos días el ministro de finanzas, Bruno Le Maire.

Todos estos ingredientes estarán este lunes en el menú de un Eurogrupo en el que no esperan decisiones relativas a la “caja de herramientas” que prepara la Comisión Europea con los elementos que tienen a su disposición los Estados miembros para combatir la subida de precios y que incluyen desde medidas para ayudar a los hogares a combatir la pobreza energética -rebajas de impuestos y ayudas a los grupos más vulnerables- hasta medidas para apoyar el suministro con inversiones.

Además, a petición del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, el asunto también estará en la agenda de la próxima cumbre de líderes europeos del 21 y 22 de octubre en Bruselas. “La actual subida de precios se produce durante la recuperación de la pandemia de covid-19, que ha marcado seriamente nuestras economías y sociedades. Los elevados precios de la energía están ejerciendo un fuerte presión sobre el poder adquiridos de nuestros ciudadanos. Muchas familias todavía sienten el impacto de las consecuencias de la pandemia”, explica el portavoz del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. Al igual que la Comisión Europea insiste que a corto plazo, la responsabilidad de ayudar a pymes, industria y hogares recae en los gobiernos europeo pero considera necesario “discutir la manera en la que la UE puede ayudar”.