El nuevo tablero de la alta velocidad ferroviaria en España ya está casi completo. Ayer se celebró en Madrid la puesta de largo del que será su cuarto protagonista tras la liberalización del sector, ‘iryo’, la marca comercial bajo la que operará el consorcio formado por Ilsa, filial de la aerolínea valenciana Air Nostrum, y Trenitalia, a partir del segundo semestre de 2022 y que fue presentada ayer en la estación de Atocha de la capital española en un acto multitudinario.

La irrupción de ‘iryo’, que competirá con Renfe (que gestiona el AVE y su reciente versión low cost Avlo) y con Ouigo (propiedad de la empresa pública francesa de ferrocarriles, SNCF) será potente. Según informó la compañía con sede social en la Comunitat Valenciana, el nuevo operador gestionará un 30 % de las frecuencias de la alta velocidad española y conectará en una primera fase Madrid, Barcelona, València, Alicante, Sevilla, Málaga,Córdoba y Zaragoza.

En un contexto de transición ecológica y en el que algunos países han empezado a limitar los vuelos cortos con alternativa en tren, la compañía destacó que empezará a operar en España «con la única flota de trenes totalmente nuevos del mercado». En concreto serán 20 unidades del ETR 1000 —el célebre Frecciarossa italiano— que han sido fabricados entre Italia y España por Hitachi Rail en colaboración con Bombardier Transportation (ahora grupo Alstom).

Proyecto verde y a largo plazo

Los trenes, los únicos en el mundo que cuentan con la Declaración Ambiental de Producto (EDP) son los «más sostenibles, rápidos y silenciosos de Europa» y están «fabricados con un 95 % de materiales reciclables y que permiten ahorrar un 80 % de dióxido de carbono por persona y trayecto», remarcaron fuentes de ‘iryo’.

Tras realizar una inversión inicial de 1.000 millones en esa flota y en el inicio de su actividad, una vez en marcha ‘iryo’ generará alrededor de 2.600 empleos y prevé atraer a 50 millones de pasajeros en 10 años «fijando un nuevo estándar de qué significa viajar en alta velocidad en España y realizando una apuesta decidida por la multimodalidad», añadieron.

En su intervención en el acto de lanzamiento, Carlos Bertomeu, presidente de Ilsa, señaló la complejidad de los sectores aéreo y ferroviario: «Todo lo complejo hay que trabajárselo durante muchos años, quizá por eso, en la compañía nos hemos acostumbrado a ser corredores de fondo».

Bertomeu reivindicó que la política de empresa será similar a la de Air Nostrum. «Nuestra fórmula está basada en varios pilares: altísima calidad operativa, cumplimiento escrupuloso de la regulación vigente, tecnología y equipos de última generación y una cultura de servicio diferencial, en la que hemos invertido mucho tiempo y dinero. Este conjunto de atributos será la principal ventaja competitiva de Ilsa», detalló.

Un nuevo estándar tras 30 años

Por su parte, Simone Gorini, CEO de Ilsa, apuntó que «España es un país a la vanguardia mundial en nuestro sector de referencia, con una de las mayores y más modernas redes de infraestructuras ferroviarias, precursor en innovación, electrificación y material rodante». Y añadió que «después de 30 años de alta velocidad en España, vamos a conseguir un nuevo estándar para el nuevo consumidor del siglo XXI, en términos de personalización, digitalización y sostenibilidad. Queremos transformar la experiencia de viajar en tren, situando al ferrocarril como transporte para un futuro más sostenible y posicionándonos en el centro de una concepción multimodal de la movilidad».