El Ibex 35 cerró ayer la semana con un descenso del 4%, lo que ha supuesto registrar su peor caída desde el 30 de octubre de 2020, y terminar por debajo de los 8.500 puntos, un nivel que no registraba desde este pasado mes de julio. El selectivo madrileño estuvo lastrado durante la jornada de ayer por el temor ante la nueva variante de la covid-19 detectada en Sudáfrica y que llevó a varios países, entre ellos España, a restringir vuelos con Sudáfrica y Botsuana. En la sesión de ayer, el selectivo ha perdido un 4,96%, situándose en los 8.402,7 puntos, su peor caída con respecto al día anterior desde junio de 2020.
El Ibex 35 acumula ya dos semanas con descensos del 3%. El analista de XTB, Joaquín Robles, explicó que esta nueva variante ha provocado el temor de una vuelta a las restricciones, si bien ha señalado que los inversores «llevaban tiempo sopesando una recogida de beneficios».
Entre las bolsas europeas, la española fue la más castigada por su fuerte exposición al sector bancario y de servicios. En concreto, IAG fue la más penalizada (cayó un 15,95%), al no poder operar en un mercado con nuevas restricciones, mientras que BBVA volvió a sufrir por la devaluación de la lira turca, después de que Erdogan defendiese su política de bajar tipos con una inflación cercana al 20%.
El petróleo sufrió de lleno las noticias de la nueva variante, así como por el contexto de nuevas restricciones en Europa, provocando un descenso del 11% en el valor del barril de crudo Brent, de referencia en Europa.
El resto de bolsas europeas anotaron ayer fuertes caídas, del 3,64% en Londres, del 4,75% en París, del 4,15% en Fráncfort y del 4,60% en Milán. Por otro lado, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el viejo continente, se situaba en 73,01 dólares, tras caer un 11,24%, mientras que el Texas se colocaba en los 68,31 dólares, tras retroceder un 12,85%.
La cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,1298 ‘billetes verdes’, mientras que la prima de riesgo española se situaba en 77,1 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en el 0,424.
Sectores más castigados
Las grandes cotizadas turísticas perdieron ayer 6.815 millones de euros de capitalización ante el aumento de los contagios en Europa, la amenaza de la nueva variante sudafricana del coronavirus y un posible endurecimiento de las restricciones en todo el mundo.
Mientras en España la situación sanitaria está, por el momento, más controlada que en otros países vecinos, las dudas sobre la evolución de la pandemia en Europa han vuelto a teñir de incertidumbre a un sector que todavía está lejos de recuperar los niveles de reservas previos a la pandemia. «Esta incertidumbre llega cuando estábamos viendo que el turismo se iba reactivando en España poco a poco, ahora vemos la situación con cierto temor a que se genere otro parón», argumentó el secretario general de la Mesa del Turismo, Carlos Abella.
Tras IAG, Aena ocupó la segunda posición del viernes negro del turismo, concluyendo la jornada con un descenso del 8,77% en el valor de sus títulos (128,45 euros por acción). La hotelera del Ibex, Meliá, cerró a 7,77% por debajo de la pasada jornada (5,84 euros por título), a niveles de los mínimos de septiembre. Les siguió la compañía Amadeus, el proveedor tecnológico del sector turístico por excelencia, que cerró con un desplome del 7,5% respecto a la jornada de ayer, lo que supone una cotización de 56,02 euros por acción. No obstante, la tecnológica ha cerrado mejor de lo esperado, tras caídas de casi el 15% a lo largo de la jornada.
