El pasado 1 de diciembre tuvo lugar el debate organizado por Prensa Ibérica en colaboración con Mutuactivos sobre el futuro de las pensiones. En este encuentro se dieron cita Ricardo González Arranz, director general de Mutuactivos Pensiones SGFP, Rafael Hurtado, director de Inversiones y Estrategia de Allianz Soluciones de Inversion AV- Allianz, Teresa Casla, presidente y CEO de Fonditel y Juan Marina, director de Nationale-Nederlanden Employee Benefits.

Situación actual del sistema público de pensiones

España asiste a un momento álgido de cambios en materia de pensiones, tanto en el ámbito público como privado. El alargamiento de la esperanza de vida, la baja natalidad o la explosión demográfica hace que el sistema se resienta, tal y como está configurado actualmente. Tanto la reforma actual de 2021, como las anteriores de 2011 y 2013, han trabajado principalmente en la línea de ajustar gastos para garantizar la sostenibilidad del sistema. “Las tres reformas están yendo en la dirección correcta, tratar de reducir gasto, de incrementar ingreso, reestructurar los gastos y los ingresos de la seguridad social para dar una mayor viabilidad, y por lo tanto reducir el déficit estructural, pero probablemente no es suficiente y necesitaremos modificaciones, cambios y transformaciones más disruptivas en nuestro sistema” apunta Ricardo González.

España cuenta con una base para poder trabajar y ver el futuro de manera optimista, pero impulsando el esfuerzo individual, tal y como señala Rafael Hurtado, “contamos con las bases para que exista un ahorro dedicado a las pensiones, en España hay gestores buenos, planes de pensiones que están desde hace 33 años… pero tiene que haber un impulso al ahorro privado” “En España tenemos un stock de ahorro importante, pero debemos canalizar ese ahorro hacia el ahorro para la jubilación” indica Teresa Casla.

Solidaridad Intergeneracional y Ahorro Privado

La sociedad necesita un cambio de mentalidad y una mayor concienciación para comenzar a tener en cuenta la planificación financiera y el ahorro individual.  “Sería bueno que vayamos creando esa conciencia de ahorro a parte de la seguridad social, es necesario ahorrar, ya sea a través de la empresa o individualmente para poder complementar esa pensión” invita Juan Marina.

La solidaridad entre generaciones siempre ha existido, el sistema sigue funcionando del mismo modo. Los actuales sistemas de Seguridad Social solo elevan a nivel nacional lo que antes ocurría dentro de cada familia. Es necesario impulsar al ahorro privado ligado a la jubilación si queremos que las siguientes generaciones puedan mantener una jubilación digna. “Se necesita apoyo regulatorio para convencer al ciudadano sobre el ahorro a largo plazo”. Rafael Hurtado.

Como sugiere Ricardo González, “una buena opción es la instrumentación dentro de un sistema de reparto de cuentas nocionales que, para el cálculo de la pensión tenga en cuenta las cotizaciones totales realizadas por cada trabajador, el entorno demográfico y la esperanza de vida en el momento de la jubilación”. España debe seguir los pasos de otros países y fijarse en entornos cercanos. “Es verdad que en otros países la pensión de seguridad social va asociada a

la esperanza de vida que tengas tras la jubilación, debemos empezar a asociar pensión y esperanza de vida. Vamos alargando la edad de jubilación, pero queda ese factor de la famosa generosidad intergeneracional “apunta Juan Marina.

Incentivos y planes colectivos

Como sociedad se antoja imprescindible crecer, ganar en ambición, ser más exigentes y una clase política proactiva a la hora de ofrecer soluciones, una mayor ayuda e incentivo a las empresas. “En todos los países europeos los 3 pilares de las pensiones, son complementarios, el público, el de empresa y el individual. Debemos conocer cómo se va a plasmar el trasvase de fiscalidad, en los próximos meses probablemente tendremos novedades” afirma Teresa Casla.

Se deben alcanzar mayores incentivos fiscales para empresas, ofreciéndoles beneficios fiscales directos. “Sería interesante introducir deducciones en cuota sobre el Impuesto de Sociedades o que las aportaciones a compromisos por pensiones no estén dentro de la base de cotización. Es necesario un incentivo directo para las empresas que impulsen el desarrollo de este tipo de ahorro”, señala Ricardo González.