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La vuelta del turismo revienta los precios de los pisos en el centro de València

El valor de los inmuebles en Benimaclet crece un 23,5 % tras el regreso de los estudiantes

Viviendas de uso turístico en el centro de València. | GERMÁN CABLLERO

La vuelta del turismo tras los meses más duros de la pandemia ha reventado los precios de los pisos en el distrito de Ciutat Vella de València, que ya tiene el coste por metro cuadrado más caro de la capital al superar a L’Eixample y a El Pla del Real. El valor de los pisos en el centro histórico ha subido un 16,5 % en 2021 con un precio medio del metro cuadrado de 2.783 euros (cerca de 300.000 euros una vivienda de poco más 100 metros), según revela un informe de la tasadora Tinsa. Detrás del ‘subidón’ está el interés de los inversores por las viviendas en el casco antiguo para alquilarlas por temporadas, situación que está provocando las expulsión de las clases medias por la ocupación de los inmuebles por extranjeros (proceso conocido como gentrificación). Los intentos del Ayuntamiento de València por frenar este proceso poniendo un límite al número de viviendas turísticas no están dando resultados a la vista de los datos recopilados por la tasadora. Otro punto de la ciudad donde se ha disparado el precio de los inmuebles es Benimaclet tras la vuelta este curso de los universitarios a los pisos de estudiantes. Las viviendas en Benimaclet se han encarecido en 2021 un 23,9 %, según Tinsa.

El precio de los pisos ha subido de media en el ‘Cap i Casal’ un 6,7 % en los últimos doce meses al situarse el metro cuadrado en 1.536 euros, aunque hay grandes diferencias entre los 19 distritos de la ciudad. Los pisos más caros por metro cuadrado están en el distrito de Ciutat Vella (que engloba a los barrios de La Seu, La Xerea, El Carmen, El Pilar, El Mercat y Sant Francesc), seguido de L’Eixample (2.381 euros), El Pla del Real (2.347 euros), Campanar (2.021 euros) y Extramurs (1.818 euros). En cualquier caso, las viviendas en L’Eixample y El Pla del Real son de media mucho más grandes (200 metros cuadrados) que en Ciutat Vella (100 metros cuadrados) por lo que el precio unitario de los inmuebles se dispara en calles como Cirilo Amorós o en Colón.

El portavoz del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Valencia (API), Vicente Díez, confirma que han constatado el interés de los inversores por la compra de vivienda turística una vez que se empieza a recuperar la movilidad. «València tiene unas condiciones inmejorables para captar turistas. Hay mucho interés por adquirir viviendas en el centro y en el distrito marítimo (Poblats Marítims) por la playa», asegura. En los Poblats Marítims (que es un distrito muy grande con algunas zonas degradadas) el coste de los inmuebles ha subido un 4,6 % en el último año hasta situarse en los 1.603 euros el metro cuadrado, según los datos de la tasadora Tinsa. El Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Valencia ha comprobado que la bajada de actividad comercial está llevando a la conversión de locales en viviendas destinadas al alquiler turístico, ya que sus requisitos son más sencillos de cumplir. Una zona donde se ha producido este fenómeno es en las calles adyacentes a Juan Verdeguer (vía situada cerca de la Ciudad de las Ciencias y el puerto de València).

Vicente Díez insiste en que este año los precios de los pisos en la capital van a subir sobre un 8 % siempre que «la pandemia nos respete y no haya restricciones a la movilidad». Díez subraya que en los últimos trimestre la vivienda en València está subiendo a un ritmo del 2 %.

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