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Sagunt logró la gigafactoría de VW tras una ‘operación relámpago’ del Consell

Rebeca Torró contactó directamente con el vicepresidente de Seat el 8 de octubre para ofrecer la candidatura a instancias de Ximo Puig cuando Extremadura y Aragón llevaban más de diez meses negociando, y en diciembre la firma se decantó por Valencia

El presidente del Gobierno, con responsables de Volkswagen, y otras autoridades. Daniel Tortajada

La llegada de la gigafactoría de baterías para el coche eléctrico de Volkswagen a Sagunt se fraguó en una ‘operación relámpago’ del Consell. La secretaria autonómica de Economía Sostenible, Rebeca Torró, envió una misiva informando de las ventajas de Parc Sagunt al vicepresidente ejecutivo de compras de Seat, Alfonso Sancha, el pasado 8 de octubre cuando Extremadura y Aragón llevaban más de diez meses negociando. Hasta ese momento Valencia estaba descartada. La multinacional alemana, como avanzó este periódico, se decantó por Valencia en diciembre aunque prolongó las negociaciones hasta marzo. Torró actuó a instancias del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, al que llegó la información surgida en un corrillo de Madrid de que a Volkswagen no le convencían ni la opción de Extremadura (la preferida del Gobierno de Sánchez) ni la de Aragón.

La disputa para conseguir la gigafactoría de baterías para el coche eléctrico comenzó el 3 de enero de 2021 cuando Invest in Spain, organismo dependiente del Instituto de Comercio Exterior (ICEX), se puso en contacto con nueve comunidades autónomas. El organismo lanzó una «oferta ciega» para dar respuesta a un fabricante chino de baterías que buscaba 140.000 metros cuadrados de superficie en España. La fecha tope fijada para la presentación de las candidaturas era el 18 de enero. La Comunitat Valenciana, sin saber todavía que detrás de la operación empresarial estaba en realidad Volkswagen, apostó por hacerse con esa inversión millonaria. De las nueve comunidades a las que el ICEX envió la oferta, siete iniciaron la carrera de fondo. Entre ellas, Cataluña, Extremadura, Aragón y la Comunitat Valenciana.

La Comunitat Valenciana (al igual que Cataluña) no pasó el corte inicial. El Gobierno quería que la gigafactoría se instalara en Extremadura para aprovechar las minas de litio y para compensar a la comunidad extremeña, que es uno de los ejemplos de la España vaciada ya que los jóvenes emigran a Madrid ante la falta de oportunidades. Sin embargo, a Volkswagen no le convencía la ubicación extremeña por las complicaciones logísticas ya que las baterías están destinadas a vehículos producidos en Martorell (Barcelona) y Landaben (Navarra).

Aragón jugó la baza de su situación geográfica entre Martorell y Landaben. El ejecutivo de Javier Lambán habilitó más de 150 hectáreas en el polígono industrial Huertos Norte del municipio zaragozano de Zuera. El proyecto aragonés suponía una inversión pública de 28 millones, a lo que había que añadir el coste de adquisición de 58 parcelas. Su ubicación, sus conexiones, la proximidad del ferrocarril, las infraestructuras energéticas, un precio del suelo muy competitivo (el coste era la mitad que el de Sagunt) y la agilidad administrativa eran las principales bazas de Aragón. El Gobierno de Lambán aprobó el pasado 12 de enero la declaración de Inversión de Interés Autonómico y de Interés General (PIGA) y apenas unos días después comenzó la negociación para expropiar los terrenos.

El esfuerzo era inútil ya que Volkswagen tenia claro semanas antes que la mejor opción era Valencia. La necesidad de suelo varió desde los 140.000 metros cuadrados iniciales hasta las 300 hectáreas al final del proceso por la necesidad de superficie para el autoconsumo energético de la planta, que operará con energía renovable. La disponibilidad inmediata de suelo (además del puerto, la conexión ferroviaría y las autovías) fue clave para la rápida decisión del grupo alemán.

En el éxito del Consell para lograr la adjudicación ha sido clave el esfuerzo de Andreu Ferrer, secretario autonómico de Presidencia y mano derecha de Ximo Puig, y el trabajo de un equipo formado (entre otras personas) por Rebeca Torró, María José Mira (secretaria autonómica de Modelo Económico y Financiación), María Dolores Parra (directora general de Internacionalización) y Vicente Joaquín García Nebot (director general de Urbanismo).

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