La asamblea general de Caixa Ontinyent aprobó el miércoles sus cuentas generales de 2021, que muestran un beneficio neto de 10,0 millones de euros, un 120,15 % superior al del 2020. De ellos, 9,2 irán a elevar el nivel de capitalización de la entidad y los 800.000 euros restantes a la Obra Social.

Precisamente, con el remanente acumulado de ejercicios anteriores, la asamblea aprobó el presupuesto de Obra Social para 2022, cifrado en 1,3 millones de euros. Entre las líneas de actuación para 2022 que recibieron el visto bueno del órgano de gobierno, la entidad de ahorros destacó ayer en un comunicado que se pretende «priorizar la calidad en la atención presencial» en oficinas, «continuar facilitando» el acceso a los servicios bancarios digitales, «acentuar las acciones de conciliación con las inquietudes de los grupos de interés de la sociedad» y del medio ambiente, y diseñar e implantar un nuevo plan estratégico a medio plazo considerando el nuevo entorno social y económico.

El presidente de la entidad, José Pla, valoró la situación del sector financiero y sus perspectivas en el actual entorno conformado por la nueva sociedad post-pandemia y por las incertidumbres respecto del impacto de diferentes factores bélicos, geopolíticos y comerciales. En cuanto al balance de gestión de los primeros cuatro meses de 2022, Caixa Ontinyent incrementa sus recursos captados en un 1,09%, pasando a 1.136 millones de euros.