El siglo que puso al Puerto en el mapa

El recinto del Grao lideró el comercio exterior del Mediterráneo a partir del año 1400 por el tirón de la agricultura y el sector textil

Embarcación utilizada para eltransporte de mercancías durante el siglo XV. m.a.montesinos

Embarcación utilizada para eltransporte de mercancías durante el siglo XV. m.a.montesinos / nombre apellido. lugar

José Luis Zaragozá

José Luis Zaragozá

El Puerto de València jugó un papel fundamental en el desarrollo económico y cultural de la ciudad en pleno auge del Renacimiento y de la Corona de Aragón. El siglo XV fue un tiempo histórico en el que Valencia, sus comerciantes y gobernantes supieron aprovechar la ubicación geográfica de la ciudad y el tiempo de paz respecto a la conflictividad interna que existía en territorios vecinos. Todo eso lo explica y pone en valor la Autoridad Portuaria de València (APV) a través de la exposición ‘El Port de València al Segle d’Or’, inaugurada esta semana en el edificio del Reloj, con la colaboración de Esther Medán y Andrea Ortiz, de la cátedra ‘Demetrio Ribes’ de la Universitat de València.

Una maqueta recrea lasituación histórica del Puertode València en el siglo XVIII. m.a.montesinos

Una maqueta recrea la situación histórica del Puertode València en el siglo XVIII. m.a.montesinos / nombre apellido. lugar

Cuentan los historiadores que la capital del Túria estaba abierta a la llegada de burgueses aragoneses y comerciantes catalanes, italianos y alemanes deseosos de hacer comercio y negocios con más garantías que en sus territorios. Valencia era su sitio, su mundo; una ciudad en ebullición, centro del Mediterráneo. Era una ciudad de 75.000 habitantes, mientras que otras como Barcelona a duras penas superaban los 14.000.

El siglo que puso al Puerto en el mapa

El siglo que puso al Puerto en el mapa / nombre apellido. lugar

En este enclave del Mediterráneo convivían artistas, comerciantes, arquitectos, escritores y poetas. Sólo en el barrio de Velluters había unos 4.000 telares de seda (de ahí el nombre del barrio), el valenciano era el idioma oficial que lo rodeaba todo y convivía también con el italiano, que sonaba en las 87 empresas italianas que estaban instaladas en Valencia; con el hebreo y el castellano.

El siglo que puso al Puerto en el mapa

El siglo que puso al Puerto en el mapa / nombre apellido. lugar

En medio de toda esa efervescencia, tal como destaca el actual presidente del la APV, Joan Calabuig, estaba el Puerto: el Grao.

El siglo que puso al Puerto en el mapa

El siglo que puso al Puerto en el mapa / nombre apellido. lugar

Fue el lugar de llegada y bienvenida de los movimientos culturales, de las nuevas técnicas de tejer la seda. Fue punto de partida de las telas valencianas, de las pasas y del vino. De los productos de la huerta valenciana. Por aquel entonces, el Puerto de Valencia era una "grada" (de ahí el nombre de Grao); un pantalán de madera que se adentraba en el mar para hacer posible la descarga y carga de las mercancías que empezaban a correr mundo.

En medio de toda esa efervescencia, tal como destaca el actual presidente del la APV, Joan Calabuig, estaba el Puerto: el Grao.

Los grandes barcos de la época no podían aproximarse demasiado al suelo. Corrían el peligro de varar en cualquier golpe de mar y tenían que hacer la estiba amarrados en los muelles de madera. El Reino de Valencia era la punta de lanza para la expansión de la Corona de Aragón por el Mediterráneo; y cómo se puede leer en los carteles de la exposición, hacia el año 1400 "València inició un crecimiento comercial y económico imparable, gracias a la situación estratégica de su puerto".

Escala del Mediterráneo

El recinto del Grao, según explica Esther Medan, se convirtió en una escala ineludible en las rutas del Mediterráneo (norte de África, islas y Alejandría), así como de otras rutas con la Europa atlántica.

En la exposición se describen las rutas comerciales de la época, la situación e infraestructuras portuarias, las principales mercancías que entraban y salían de Valencia por vía marítima, edificios emblemáticos de la ciudad de esta etapa y las tendencias artísticas.

Resalta la comisaria de la exposición que la muestra está dividida en varias secciones "que nos hacen retroceder en el tiempo para situarnos en plena València medieval". La proyección internacional que le daba el puerto a la capital hizo de València una ciudad cosmopolita, que levantó la Lonja y creó instituciones como el Consolat de Mar para establecer garantías jurídicas en el comercio marítimo: cereales, azafrán, frutos secos, pasas, azúcar o la miel, entre otros productos.

"Los excedentes agropecuarios de Valencia, centro de la Corona de Aragón, y de su hinterland (área de influencia) se exportaban desde el Puerto de València", destaca Esther Medan. Además, en el área industrial se disparó el comercio exterior de productos textiles como la lana, el lino y el esparto. Y de especias y sedas.

La crisis de la filoxera

Unos siglos después de aquel tiempo llegó a tierras valencianas una crisis muy grave que arruinó el campo valenciano: la filoxera. Se trata de una plaga que arruinó a familias, pueblos y comarcas valencianas enteras. El viñedo-después de la seda- fue el producto que sustentaba la economía autóctona, reforzado con su exportación.

"Aquella plaga hizo una auténtica derrota; una verdadera crisis que pudimos superar por el espíritu emprendedor de los valencianos", recuerda Joan Calabuig . En aquellos años - en la recta final del siglo XIX - un innovador sistema de cooperativas agrarias locales permitió superar los obstáculos de la gran banca. El campo valenciano pudo sustituir a la uva por la naranja y volvió a crecer el comercio exterior del Puerto.

Parte de la exposición está dedicada a conocer las principales artesanías de lujo que se producían en la ciudad como las sedas y la cerámica de Manises y Paterna, productos muy solicitados por la realeza y las familias nobiliarias más importantes de la Europa medieval. También hay espacio para mostrar el papel que tuvo el establecimiento de la imprenta en València, gracias a las conexiones comerciales internacionales y la difusión de la cultura y las letras valencianas de autores como Joanot Martorell, Ausiàs March o Isabel de Villena.

Suscríbete para seguir leyendo