Según el Banco de España

La reforma de las pensiones acabará gravando 10 veces más a los salarios altos que a los bajos

Así lo calcula un informe publicado este miércoles por el Banco de España, que también anticipa que la Seguridad Social recaudará algo menos con las nuevas 'palancas' de lo que calcula el Gobierno

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. / EP

Gabriel Ubieto

La reforma de las pensiones aprobada durante la presente legislatura por el Gobierno de coalición hará recaer gran parte de la sostenibilidad del sistema en los salarios más altos. Hasta el punto de que las subidas de cotizaciones recién aprobadas -parte ha entrado ya en vigor, parte lo hará progresivamente en los próximos años- aumentarán los costes laborales para las empresas casi 10 veces más entre sus empleados con salarios más altos que entre aquellos con sueldos más bajos.

Así lo calcula un informe publicado este miércoles por el Banco de España, que también anticipa que la Seguridad Social recaudará algo menos con las nuevas 'palancas' de lo que calcula el Gobierno. El supervisor bancario se suma así a la Airef, que ya reprendió a Escrivá por generar, a medio plazo, más gastos que ingresos con su reforma.

Desde Seguridad Social insisten en que la reforma implicará un aumento "moderado" y "asumible" de costes para las empresas y que no supondrá un lastre para las empresas. Según sus números, la subida de cotizaciones implicará un incremento medio de los costes laborales de 37 céntimos, pasando de los actuales 23,4 euros por hora a, precios constantes, 23,8 euros por hora en 2050. El Banco de España desgrana dicha media y confirma que el impacto entre los trabajadores mejor remunerados será mayor.

Objetivo: pagar las pensiones del 'baby boom'

El ministro de Inclusión, José Luis Escrivá, culminó el pasado 16 de marzo su reforma de pensiones, aprobando en el Consejo de Ministros el último eslabón de la misma. Una batería de 'palancas' para recaudar más y llevar así más recursos a las arcas de la Seguridad Social con los que costear el progresivo retiro de los 'baby boomers'.

Se trata de una generación más numerosa que sus sucesoras y que promete tensar los equilibrios del sistema público de prestaciones, al haber durante un periodo de unos 30 años un número creciente de jubilados y menos cotizantes en activo para mantenerlos.

Con el fin de reequilibrar esa tensión entre generaciones, Escrivá ha diseñado una reforma cuya implementación ya no dependerá de él y que se irá desplegando progresivamente hasta 2050. Reforma que, en su último capítulo, no contó con el respaldo de la patronal CEOE, debido al aumento de costes laborales que implicaba para las empresas, especialmente para las más grandes.

Bancarios, médicos y consultores

Los investigadores Brindusa Anghel, Sergio Puente y Roberto Ramos confirman en su análisis publicado este miércoles el retrato robot del principal afectado por esa subida de cotizaciones: Hombre, de edad mediana tirando a alta, empleado en una gran empresa y del sector bancario, en sanidad o en una consultora. Un sobrecoste que recaerá en las empresas, que deberán pagar más al Estado para poder remunerar el mismo sueldo a sus empleados.

El estudio publicado cuantifica el impacto diferencial que tendrá la subida de bases máximas de cotización y la tasa de solidaridad diseñadas por Escrivá. A grandes rasgos, actualmente los salarios más altos dejan de cotizar a partir de una determinada cuantía y, a partir de ahora, dicha cuantía subirá y, además, se aplicará un recargo sobre la parte del salario que seguirá sin cotizar.

El Banco de España cuantifica que el efecto de esos mecanismos -que se irán desplegando progresivamente hasta 2050- será ínfimo al principio y sustancial al final. Hasta el punto de que el aumento del tipo efectivo de las cotizaciones sociales variará entre 0,8 puntos (salarios más bajos) y 1,6 puntos (salarios más altos) en 2025 y se irá agrandando hasta una horquilla entre 1,2 puntos y 11,3 puntos, en 2050. 

"Este informe pone en valor el componente redistributivo de la reforma, mostrando que el esfuerzo de solidaridad moderado y asumible se le pide sobre todo a los que más ganan, sin afectar a los salarios más modestos y a las pymes", apuntan fuentes de la Seguridad Social.

Menos recursos de lo previsto

Otra conclusión que deja el informe del Banco de España es que ese aumento de las cotizaciones acabará llevando a la caja de la Seguridad Social menos dinero de lo previsto por el Gobierno. Según las estimaciones del supervisor bancario, la reforma empezará recaudando anualmente -a través de las nuevas palancas para generar ingresos- el equivalente a un 0,6% del PIB en 2030. Para luego ir progresivamente aumentando hasta el 0,9%, en 2050.

Unas estimaciones que infravaloran las realizadas por el Ministerio de Seguridad Social, que prevé ingresar un 1,09% más en 2050, casi dos décimas más que lo que anticipan desde el Banco de España. 

El peso de las diferentes palancas para generar ingresos irá variando a lo largo del tiempo y si bien al principio tendrá un impacto similar entre colectivos, no será hasta entrada la década de los años 30 cuando las capas mejor remuneradas empezará a contribuir con especial intensidad. Hasta el punto de que de esos 0,9 puntos de ingresos adicionales que calcula el Banco de España, casi la mitad lo aportarán íntegramente los salarios más altos y el resto se repartirá entre todos los trabajadores, a través del aumento de cotizaciones conocido como Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI).