La logística y los problemas con la telefonía e internet afectan a las áreas empresariales de la Comunitat Valenciana

Sin concretar las pérdidas en cifras económicas "los distintos sectores productivos el apagón eléctrico ha tenido una repercusión limitada en la actividad empresarial de la Comunitat Valenciana", explica un informe de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) con motivo del gran apagón eléctrico. En líneas generales, la normalidad ha sido la tónica predominante, gracias, en buena parte, a la previsión de las grandes empresas, que cuentan con sistemas de autogeneración eléctrica que permitieron mantener la operatividad sin incidencias reseñables. Este fue el caso de sectores como el químico, plástico, metalúrgico, textil, madera, calzado y alimentación, donde no se han reportado interrupciones significativas.

El sector turístico también ha funcionado con relativa normalidad, sin que los clientes hayan sufrido contratiempos destacables. Hoteles, comercios y aeropuertos lograron mantener la actividad, si bien se produjeron problemas puntuales en el transporte ferroviario, especialmente en los servicios de AVE.

Desde el sector agroalimentario se señala que el impacto ha sido reducido, en parte porque la incidencia coincidió con un festivo en muchas localidades. Aun así, algunas empresas de mayor tamaño vieron afectada su capacidad de producción al no poder cubrir completamente la demanda energética con sus generadores, aunque en ningún caso se han producido daños graves.

!El ámbito donde se concentraron más dificultades fue el logístico, donde la falta de suministro eléctrico complicó operaciones y generó ciertas demoras en la distribución", indica la organización empresarial presidida por Salvador Navarro.

Capacidad de respuesta

Según la CEV, pese a tratarse de una situación excepcional, "la capacidad de respuesta del tejido empresarial de mayor tamaño ha demostrado ser sólida, minimizando el impacto del apagón y garantizando la continuidad de la actividad en la mayoría de sectores".

Por el contrario, el colectivo de trabajadores autónomos y pequeños negocios ha sido uno de los más perjudicados por el apagón. Al no contar habitualmente con sistemas de respaldo energético ni con recursos para mitigar rápidamente este tipo de contingencias, muchos autónomos vieron interrumpida su actividad de forma inmediata. Sectores como el comercio de proximidad, la hostelería, peluquerías, talleres, estudios profesionales y actividades vinculadas a la conectividad digital fueron algunos de los más afectados. Aunque el hecho de coincidir con un día festivo en muchas localidades limitó el alcance total del daño, para aquellos autónomos que sí estaban operativos el impacto ha sido notable, evidenciando de nuevo su especial vulnerabilidad ante cualquier interrupción del suministro.

En último lugar, desde la CEV se ha solicitado a las autoridades competentes la ampliación de los plazos, al menos en un día, para todos los procedimientos y expedientes administrativos de la Administración. "Esta petición busca facilitar que tanto empresas como particulares puedan cumplir con sus obligaciones sin verse perjudicados por la interrupción del servicio eléctrico", agrega la patronal valenciana.

Polígonos industriales

Los problemas con la telefonía e internet condicionaron ayer la vuelta a la normalidad de las áreas empresariales de la Comunitat Valenciana. Todos los polígonos disponían ayer de electricidad, pero algunos sufrieron cortes importantes de las telecomunicaciones. Diego Romá, presidente de la Federación de Parques Empresariales de a Comunitat Valenciana (Fepeval), señaló que ayer fue un día de transición tras los problemas del lunes por la falta de electricidad desde las 12.33. “La luz ha vuelto a todas las áreas empresariales. No tenemos problemas con el suministro. El lunes el suministro eléctrico se recuperó de manera desigual entre las 17.00 horas y la madrugada en el área metropolitana de valenciana. En algunos parques industriales la luz volvió a las dos de la madrugada”, explicó Romá.

El representante de las áreas empresariales valencianas insistió en que ayer el problema eran las telecomunicaciones. “En algunas zonas ha fallado internet y la telefonía. Es un día de transición en el que se está poniendo todo en orden. Algunos trabajadores han tenido dificultades para llegar a sus empresas porque las redes de transporte están afectadas”. De hecho, Metrovalencia sufrió retrasos en los primeros servicios del día.

Cámara de Comercio

Por su parte, el presidente del consejo de Cámaras de Comercio de la Comunitat Valenciana, José Vicente Morata, señaló que será “en los próximos días” cuándo se podrá conocer el impacto real de un corte energético que deja un doble golpe para algunas actividades. Por un lado, un “coste directo por la perdida de producto, sobre todo en el sector agroalimentario o en el farmacéutico por las roturas de las cadenas de frio” y, por otro, el lucro cesante -es decir, la facturación pérdida- que han tenido algunas firmas y cuyo balance se conocerá próximamente mediante las compañías de seguro.

Más allá de este aspecto, Morata quiso poner en valor el retorno a la “normalidad” que hubo ayer en el tejido productivo valenciano. Tras destacar que la pérdida de suministro eléctrico no supone “un lastre” para infraestructuras como el puerto de València, el dirigente recordó que “el sistema y las empresas están funcionando perfectamente” porque “no ha habido desabastecimiento” y las firmas han sabido “actuar de manera eficaz”. 

No obstante, pese a destacar que este corte eléctrico tuvo “una reconexión en un tiempo récord”, Morata sí apuntó a que “cada vez queda más de manifiesto que se necesita un sistema de alertas que funcione”.

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