Compromís y PSPV exigen al Ayuntamiento de València que compre el edificio de los pisos a 67.000 euros

Compromis y PSPV han exigido esta mañana al Ayuntamiento de València que ejerza el derecho de tanteo y adquiera el edificio que va a comprar una sociedad de inversión por 67.000 euros la vivienda. Los dos grupos municipales reclaman a Catalá que incremente el parque de viviendas destinadas a alquiler social. Preguntado por el derecho a tanteo, el Ayuntamiento de València asegura que "no tiene constancia de la operación" y que la Generalitat tampoco.

Ante la información adelantada por Levante-EMV sobre la firma de un contrato de arras por parte de la sociedad de inversión Ktesios con el fin de adquirir 134 viviendas de VPO por un precio total de cerca de nueve millones de euros, desde el grupo municipal de Compromís proponen a la alcaldesa Catalá que sea el Ayuntamiento de València el que proceda a ejercer el derecho, adquirirlas por el precio anunciado. El concejal de Compromís Ferran Puchades ha recordado que en todo el mandato del gobierno del PP y Vox encabezado por Catalá el Ayuntamiento no ha adquirido ni un solo inmueble a través del tanteo y retracto. Por contra, Puchades ha afirmado que "gracias al gobierno de Joan Ribó, València adquirió las 131 viviendas, 83 plazas de aparcamiento, 22 trasteros y 3 locales del edificio del barrio de Safranar donde Catalá pudo reubicar a las víctimas del incendio de Campanar y también algunas personas afectadas por la inundación de la Dana”.

"Una vergüenza"

Por su parte, el portavoz del PSPV-PSOE en el Ayuntamiento de Valencia, Borja Sanjuan, asegura: "Mientras los vecinos de València no pueden pagarse un alquiler ni mucho menos comprarse una vivienda, acabamos de conocer que un fondo buitre, un fondo de inversión, va a comprar 134 viviendas por solo 67.000 cada una. Es una vergüenza lo que está pasando en la ciudad de València, donde los especuladores están comprando muy barato para alquilar y vender muy caro y le exigimos al Ayuntamiento de València que intervenga en esta operación y que adquiera las viviendas para dedicarlas a alquiler asequible. No puede ser que la ciudad se haya convertido en un tablero del Monopoly en el que muchos están viniendo a hacer dinero mientras el ayuntamiento mira hacia otro lado".

El concejal Ferran Puchades critica que "Catalá se pone medallas de hacer cosas a pulmón gracias a que se encontró el trabajo realizado pero, desde que ella es responsable, no ha sido capaz de comprar ninguna casa por tanteo y retracto". Puchades insta a la alcaldesa a fin de que, en caso de que la Conselleria competente no haya comunicado al Ayuntamiento la posibilidad de ejercer este derecho, la requiera inmediatamente puesto que el plazo de sesenta días comienza desde que la Conselleria ha tenido conocimiento de la operación.

Pleno municipal

Desde el grupo municipal de Compromís han anunciado que, en caso de que no se resuelva de forma inmediata esta situación, presentarán una moción ante la próxima Comisión Municipal de Urbanismo a fin de que sea ésta quien proceda a la aprobación de la operación inmobiliaria. Ferran Puchades ha indicado que desde Compromís se propuso ampliar en 30 millones de euros la partida inicial de 22 millones previstos para la adquisición de viviendas para destinarlas a alquiler asequible. En todo caso, el concejal ha instado a Catalá a que, para obtener el dinero necesario, empiece por reducir las diferentes partidas de publicidad y propaganda del vigente presupuesto municipal que la alcaldesa ha incrementado en un 161% respecto a 2024. Para Puchades, "el dinero que Catalá se ha puesto para el autobombo, serían más útiles para comprar”.

Imposible comprar por ese precio

El edificio que ha comprado la sociedad de inversión Ktesios a 67.000 euros cada piso vale el doble en el mercado. El inmueble lo ha puesto a la venta a Inmo Criteria Caixa (una firma de la Fundación la Caixa) y los 134 pisos que lo componen están arrendados como viviendas protegidas. Fuentes del sector aseguran que la Administración "debería ejercer" su derecho de tanteo para ampliar su parque social de viviendas porque es imposible comprar pisos por ese precio en València. Además, la empresa que ha acordado la compra puede vender los pisos a precio de VPO, multiplicando sus ganancias. Si se aplica el precio actual de la VPO, los pisos tendrían un coste de unos 150.000 euros (valor que además muy inferior a un inmueble de renta libre).

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