La oferta de pisos turísticos en València casi duplica a la del alquiler tradicional

La oferta de pisos turísticos en València casi duplica a la del alquiler tradicional. La capital del Túria solo dispone de 5.800 inmuebles de arrendamiento tras perder 10.000 en cuatro años, según revela un informe de la plataforma inmobiliaria Idealista. En estos cuatro años, arrendar una casa se ha transformado en algo parecido a participar en un casting con una oferta de viviendas que se ha desplomado a mínimos históricos y un precio que se ha disparado un 69,3 %. El 'Observatorio de la Vivienda de la Universitat Politècnica de València' advierte de que el alquiler medio de un piso de 70 metros cuadrados en la capital supera los 1.600 euros.

El mercado de la vivienda de alquiler en los principales mercados es especialmente preocupante, según Idealista, en ciudades como València, Barcelona, Madrid o Málaga. La capital del Túria solo dispone de 5.839 alquileres de larga estancia frente a 9.216 turísticos. Además, hay 871 viviendas destinadas al arrendamiento por temporada (once meses como máximo y con un precio mucho más elevado que del alquiler tradicional).

El descenso de la oferta de alquiler de larga estancia en València roza las 10.000 viviendas entre 2020 y 2024, mientras que los pisos turísticos han aumentado en 3.500 (hay un 61,5 % más) y los de arrendamiento por temporada en un centenar. Además, en la capital hay 36.000 viviendas vacías, lo que representa un 8,7 % del total que hace cuatro años.

El chabolismo "va a ir a más"

Este auge de los pisos turísticos ha agravado en problema de la falta de vivienda en València y en su área metropolitana. La Cátedra Observatorio de la Vivienda de la Universitat Politècnica alertó ayer de que el chabolismo en València "va a ir a más" por el crecimiento exponencial de la población y esa falta de pisos. El departamento de análisis de la vivienda, que es una referencia en el sector inmobiliario, insiste en que la capital del Túria carece de suficientes viviendas para hacer frente a la demanda, marcada fundamentalmente por extranjeros que llegan para trabajar. "Tenemos un elefante en la habitación que va a ir a más. La inmigración conlleva consecuencias muy buenas y otras que hay que ajustar", apuntó Fernando Cos Gayón, director del Observatorio, en el arranque del congreso AIRE (organizado por la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Edificación de la UPV).

Cos Gayón recordó que desde el Observatorio han venido alertando desde 2021 del riesgo de "asentamientos informales" por la espiral alcista de los precios de la vivienda y la falta de oferta. "La cantidad de gente que está llegando a València es tal que no hay posibilidad de alojarlos", lamentó. La ciudad ganó 23.000 habitantes en 2023 y casi 20.000 en 2024, y ya cuenta con 844.424 empadronados. El responsable de la cátedra criticó a los "terraplanistas" que defienden que no hacen falta más viviendas en València y que apuestan por sacar las vacías al mercado.

Precios al alza

El director de la cátedra incidió en que la situación es compleja. "Tendremos gente que llegará y no le quedará otra opción que el chabolismo", reiteró. Además, destacó que, por otro lado, seguirán entrando extranjeros con alto poder adquisitivo que impulsarán todavía más los precios al alza. La población refugiada en asentamientos chabolistas de la ciudad de València ha crecido un 21% en dos años. Según la información ofrecida por la concejalía de Servicios Sociales a una pregunta del grupo municipal Compromís, la cifra ha pasado de las 673 personas ubicadas en asentamientos en 2022 a las 815 en el año 2024, es decir, casi 150 personas más. 

Por otro lado, Cos Gayón incidió en que debe bajar la presión fiscal sobre la compraventa, ya que es un 24 % más alta que en la media europea.

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