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AGRICULTURA

El arroz valenciano cierra una recolección con sabor a desastre

Pesimismo entre los arroceros de l’Albufera, que viven los coletazos de la actual campaña sumidos en la desazón por el hundimiento de la producción

José Pascual Fortea, esta semana en sus campos

José Pascual Fortea, esta semana en sus campos / Levante-EMV

València

No faltará ni un grano para hacer las paellas valencianas de los próximos meses. Así que aléjese la desazón de los consumidores. La intranquilidad, sin embargo, sí se ha apoderado de los productores de arroz valencianos, que asisten a los estertores de la actual temporada de recolección con la certeza de que esta campaña es ya «un desastre total», según afirma el dirigente de la Unió Llauradora Fernando Durà, quien coincide en tal funesta visión de la realidad con José Pascual Fortea, responsanble de la sectorial de este cultivo en la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja). Esta organización es concluyente: Estamos ante «la siega más ruinosa que se recuerda».

Los datos son reveladores: la cosecha este año va a registrar en general un descenso de entre el 25 % y el 30 %, según Fernando Durà. Lo normal es alcanzar una producción de unos 120 millones de kilos, lo que implica que la merma se situará entre los 30 y los 40 millones. La Unió Llauradora estima que la reducción en variedades emblemáticas como la bomba o la albufera está entre el 50 % y el 80 %, según los campos. AVA se mueve en números parecidos: un 75 %, aunque en términos generales rebaja el recorte de la cosecha a entre un 15 % y un 20 % en el parque natural de l’Albufera.

Hongo

¿Qué está pasando para que el arroz valenciano viva este año tanta penuria?. La respuesta principal está en el hongo piricularia y la derivada en las restricciones a utilizar ciertos fungicidas, coinciden las dos organizaciones agrarias.

Fernando Durà

Fernando Durà / Levante-EMV

La piricularia es el principal enemigo. Como explica Fortea, es un hongo que ataca la espiga y la deja seca. Durà añade que en este año particularmente húmedo «se ha disparado». El dirigente de la Unió Llauradora cuenta que hace siete años las autoridades agrarias prohibieron un fungicida «barato y bueno» que los arroceros utilizaban para luchar eficazmente contra la piricularia «y nos autorizaron otros no tan buenos. De hecho, los fabricantes de ese producto ya nos avisaron de que el nuevo crearía resistencias y es lo que ha pasado». La solución pasapor cambiar de materia activa.

Ayudas

AVA solicita una línea excepcional de ayudas para los arroceros afectados por piricularia, pero de manera estructural reclama a la UE y el Gobierno español que modifiquen el sistema de autorización de materias activas y aprueben permisos excepcionales de fungicidas que permitan combatir las plagas y enfermedades del cultivo. Solicita también que el seguro del arroz amplíe sus coberturas e indemnizaciones para paliar las pérdidas reales de producción a causa de la piricularia y otros patógenos.

Arrozales de la Albufera en una imagen de archivo

Arrozales de la Albufera en una imagen de archivo / JM LOPEZ

El tesorero de AVA y presidente del grupo de trabajo del arroz en el Copa-Cogeca, Miguel Minguet, augura un futuro siniestro: «Primero vamos a perder las variedades tradicionales amparados por la DO Arroz de Valencia y después perderemos a la mayoría de los arroceros. Ya prácticamente no queda bomba ni albufera, este año también ha comenzado a afectar al j. sendra. ¿Vamos a renunciar a las variedades ligadas a nuestro territorio y nuestra gastronomía?».

No obstante, Fortea asegura que la producción local actual es suficiente para cubrir el mercado interno, pese a las crecientes importaciones por tener los precios más baratos, mientras que Durà apunta un motivo de esperanza y es que la próxima campaña la previsión es buena «si hay armas para luchar contra la piricularia».

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