Encontrar trabajo, ya de por sí, se puede convertir en una tarea difícil para cualquier persona. Si se trata de alguien joven y en situación de vulnerabilidad social suele ser todavía más complicado. Para tratar de ayudar a estas personas, Fundación Cepaim Acción integral con migrantes trabaja, con la colaboración de la Fundación «la Caixa» en el proyecto «Activa’t: Programa d’empleabilitat per a joves de Sant Marcel·lí», un barrio en el que había una tasa de desempleo del 36,2 % en el año 2019, según los datos que ofrecía el censo de población del Ayuntamiento de València, y en el que, según aprecia la delegación en la Comunitat Valenciana de Cepaim, «existe una escasez de recursos de orientación laboral más que preocupante». 

La iniciativa, dirigida a chicos y chicas de 16 a 24 años que ni estudian ni trabajan, se encuentra enmarcada en la línea del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 8.6 marcado por las Naciones Unidas, que reclama «reducir considerablemente la proporción de jóvenes que no están empleados y no cursan estudios ni reciben capacitación». 

Asimismo, pretende disminuir también las tasas de exclusión social, pobreza y desempleo que afectan a este colectivo.

El programa, que ha atendido durante este año a una treintena de jóvenes, se concibe desde un trabajo de acompañamiento grupal e individual de estos chicos y chicas para la búsqueda de empleo. Para ello se combinan sesiones grupales y entrevistas individualizadas con las que se trata de personalizar su itinerario laboral y de crear un grupo motor de apoyo. De este modo, los usuarios y usuarias del programa se forman tanto en competencias transversales para la búsqueda activa de empleo como en las competencias técnicas necesarias que les permitan desarrollar nuevos conocimientos y saberes para poder conseguir en la mayoría de los casos su primer empleo.

Con estas pautas, el programa Activa’t pretende favorecer la adquisición de habilidades sociales y laborales, así como la asunción de valores de solidaridad, sostenibilidad, igualdad e intreculturalidad; mejorar las competencias técnicas y transversales de las personas participantes a través de la formación ocupacional, la formación para el empleo, las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (NTIC) presenciales, online o mixtas y la reincorporación al sistema educativo; y facilitar el conocimiento del entorno laboral para lograr una mejor incorporación al mercado de trabajo, haciendo hincapié en los cambios que se están produciendo como consecuencia de la crisis de la covid-19, nuevos yacimientos de empleo, emprendimiento y economía social y recuperación de los oficios tradicionales.