Los agricultores buscan la eficiencia en el riego gracias a la tecnología

La escasez de agua se está convirtiendo en un problema de vital importancia y trascendencia que exige soluciones sin demora, especialmente en zonas áridas, aumentando el debate y la competencia por la disponibilidad y uso de este recurso escaso entre consumidores agrícolas, industriales y urbanos. Y el rápido crecimiento de la población, la mayor incidencia de la sequía causada por el cambio climático y las diferentes actividades humanas son factores que están acrecentando esta situación. 

Esta situación de carencia, y la insuficiencia de soluciones para afrontar las necesidades presentes y futuras, constituye para la agricultura un factor limitante de la producción en los cultivos agrícolas y genera la necesidad de crear estrategias dirigidas a mejorar la eficiencia del uso del riego, tal y como exige y demanda el mercado europeo, en el marco de un clima cambiante y cada vez menos predecible.

Los avances en tecnología que conlleva la agricultura de precisión son claves para la monitorización objetiva y la toma de decisiones racionales. El perfeccionamiento de la producción agraria parte de la optimización del riego mediante una actividad moderna y sostenible. En ese sentido, las comunidades de regantes han venido desarrollando un papel fundamental en la modernización del riego, con inversiones destinadas a la implantación de sistemas localizados y la incorporación de nuevas tecnologías en distribución del agua, automatización, energías renovables como el bombeo solar, con la instalación de placas solares fotovoltaicas en los centros de distribución y la fertirrigación conjunta, minimizando el efecto negativo de las estructuras minifundistas presentes en la Comunitat Valenciana.

Innovación agroalimentaria

Grupo Cooperativo Cajamar, desde su área de Innovación Agroalimentaria apuesta por el uso sostenible y la gestión eficiente de los recursos hídricos, desarrollando diferentes líneas de investigación en sus centros experimentales, focalizados en el ahorro y el uso eficiente del agua en agricultura.

Para ello cuenta con Cajamar Innova, incubadora de empresas de alta tecnología del agua, que apoya a empresas y startups de base innovadora para hacer viables aquellos proyectos que aporten soluciones a la gestión eficaz de los recursos hídricos. Hasta la fecha ya son 68 las iniciativas beneficiadas de sus programas de ayuda, que desarrollan tecnologías para la mejora en la eficiencia del uso del agua, su distribución, sensorización y automatización. Estos proyectos trabajan en nuevas posibilidades del uso de aguas regeneradas, desalación y su impacto en el medio ambiente, así como en sistemas de desinfección de aguas, integrando diferentes disciplinas que mejorará su uso en los próximos años.

En esa misma línea, Grupo Cajamar cuenta con la Plataforma Tierra comunidad digital de conocimiento agroalimentario, en la que los profesionales del campo pueden acceder a una aplicación web gratuita para la gestión del riego y el abonado de sus parcelas, tanto para cultivos al aire libre como en invernadero, para optimizar el consumo de agua y fertilizantes, con recomendaciones diarias en función de las condiciones meteorológicas concretas de su explotación.

Objetivos eficientes

Estas herramientas son clave para hacer un uso eficiente de los recursos, especialmente en lo que hace referencia al uso del agua de riego, realizan un cálculo de forma sencilla, teniendo en cuenta las condiciones climáticas y de cultivo, de manera personalizada por geolocalización, utilizando registros climáticos del día anterior y su previsión, considerando las características particulares como el análisis de agua, suelo, características del cultivo y funcionamiento hidráulico.

La mejora en la eficiencia en el uso del agua y de los fertilizantes en agricultura es una responsabilidad de todos. Su gestión sostenible pasa por una mejora más eficaz de los recursos, mediante el uso de nuevas tecnologías, infraestructuras y reducción de la contaminación de acuíferos.