Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Reformas hoteleras para reabrir con fuerza

El presidente de la patronal, que invierte 3 millones en sus hoteles, destaca que su idea es volver a operar con productos actualizados y competitivos porque los que se queden en «medias tintas» pagarán las consecuencias

Miguel Esparza (I.) observa las mejoras en el hotel Primus de València. | GERMÁN CABALLERO

Los propietarios de hoteles de la Comunitat Valenciana a los que la crisis ha cogido mejor preparados y con una situación de caja saneada están aprovechando el cierre por la falta de turistas para actualizar sus establecimientos. Atom dedica 3 millones de euros a la renovación del Meliá València de la avenida Corts Valencianes, Urbem destina 1,2 millones a mejorar el hotel Primus situado junto a la Ciudad de las Ciencias y Port Hoteles (la cadena del presidente de la patronal hotelera valenciana) invierte 3 millones en sus establecimientos de València y la Costa Blanca. Incluso cadenas jóvenes como Myr han mejorado los restaurantes y han remodelado habitaciones de sus hoteles en València. Otros empresarios con menos escrúpulos han anunciado proyectos presuntamente inexistentes para justificar la presentación de Expediente de Regulación de Empleo (ERE), según alerta Ximo Solá, vocal del Gremi d’Hotels de València. La consultora Deloitte apunta que la edad media de los hoteles valencianos es de 10,6 años frente a los 9,5 de los del conjunto del país y recomienda a los empresarios con capacidad que inviertan para incrementar sus ingresos.

Deloitte precisa que entre 2013 y 2019 los grupos hoteleros e inversores destinaron en toda España unos 5.000 millones de euros para la construcción y reforma de 850 hoteles con 150.000 habitaciones. El estudio de la consultora asegura que los hoteles que recibieron la inversión registraron un incremento del 6,8 % en el ingreso medio por habitación disponible motivado por un aumento del 4,3 % en la tarifa media diaria.

Toni Mayor, propietario de la cadena Port Hotels y presidente de la patronal valenciana (Hosbec), subraya que con los hoteles vacíos es más fácil acometer las obras. «Con las instalaciones cerradas tienes la oportunidad de hacer mejoras sin molestar al cliente. Podemos sustituir instalaciones y poner al día toda la infraestructura del establecimiento. Al mismo tiempo, damos trabajo y ayudamos a parte de la plantilla». El representante de los hoteleros valencianos incide en que en los últimos años sí se ha producido una renovación de los establecimientos valencianos. «En toda la planta hotelera ha habido una reconversión industrial de primer orden en los últimos seis o siete años. En estos momentos se están reformando cuatro o cinco hoteles en Benidorm que van a pasar de tres a cuatro estrellas y a cuatro estrellas superior. Además, se están construyendo tres hoteles con una inversión que supera los 100 millones. Benidorm no ha perdido la filosofía de una reconversión permanente. Trata de estar siempre a la vanguardia». Port Hotels destina los 3 millones a reformar 9 habitaciones en el histórico hotel Huerto del Cura (Elx) para ofrecer una experiencia de 5 estrellas, la renovación de los establecimientos Port Feria València y Port Azafata València y a mejorar sus establecimientos en Dénia, Calp y Benidorm.

La consultora Colliers informa de que en el último año los hoteleros valencianos han invertido 137 millones de euros en la mejora de sus hoteles. Laura Hernando, directora general de hoteles de Colliers, señala que las reformas se frenaron durante el confinamiento, pero después se han retomado.

Miguel Esparza, director general de Urbem, declara que han aprovechado el cierre del hotel Primus para darle un nuevo impulso con una inversión de 1,2 millones de euros. Es la primera mejora importante del establecimiento de Urbem de 262 habitaciones desde que abrió sus puertas en 2007. «Cerramos en diciembre por la falta de clientes e iniciamos los trabajos en enero. Estamos procediendo al cambio de mobiliario y colchones y a la mejora de cuatro de las ocho plantas. Nuestra primera previsión era retomar la actividad en marzo, pero va a depender de la evolución de la pandemia. Ahora creemos que el cierre se alargará hasta mayo», predice. El hotel se ha beneficiado del músculo financiero de Urbem, que es una de las pocas promotoras valencianas que superó con éxito la crisis provocada por el estallido de la burbuja inmobiliaria.

La cadena valenciana Mir Hoteles (que pertenece al grupo Comatel) también se ha beneficiado de su disposición de efectivo para volver con fuerza en cuanto se reactive el turismo. Mir pertenece al grupo Comatel, especializado en el sector del juego. La cadena ha invertido en los últimos tres años más de sesenta millones de euros sin recurrir a financiación externa. Fidel Molina, cofundador de Comatel, revela que han aprovechado el cierre de todos sus establecimientos en València (porque no era rentable mantenerlos abiertos con una ocupación del 10 %) para remodelar habitaciones, reformar los restaurantes y mejorar las zonas de spa.

Ximo Solá destaca las obras que están acometiendo la sociedad de inversión inmobiliaria cotizada en bolsa (socimi) Atom en el Meliá València situado frente al Palacio de Congresos y la cadena Ilunion en su establecimiento de la avenida de las Corts Valencianes (frente al nuevo Mestalla). Sin embargo, Solá advierte de que algunos empresarios se han aprovechado de la situación para despedir a la plantilla con un ERE. «Lo hacen para justificar el ERE por razones técnicas. Hay hoteles que sí lo hacen de buena fe, pero otros no», lamenta.

En cualquier caso, una parte del sector sí que está haciendo los deberes ante la vuelta de la actividad. Toni Mayor apunta que prevén que la situación mejore en 6 meses. «La idea es volver a operar con productos actualizados y competitivos. Las medias tintas pagarán las consecuencias», sentencia.

Compartir el artículo

stats