Quince días después de las elecciones, los candidatos del PSPV, Ximo Puig, y de Compromís, Mònica Oltra, han mantenido su primer encuentro cara a cara y sin más testigos de por medio. Ni asesores, ni otros dirigentes ni el tercer convidado en otros encuentros, el líder de Podemos, Antonio Montiel. Ha sido esta mañana en el edificio del hemiciclo en las Corts Valencianes, se ha precipitado por casualidad y ha sido calificado como «informal» por fuentes socialistas.
Ximo Puig había acudido a presentar el grupo de los 23 diputados socialistas electos y se encontró con Oltra. Justo minutos después de que el líder del PSPV denunció que uno de los principales escollos para el pacto de izquierdas son los 4.000 millones más de gasto que «algunos exigen», en alusión a Compromís, cuando «no podemos seguir endeudándonos, no podemos decirle eso a la gente, no podemos prometer lo que no podemos hacer». Las mismas fuentes han calificado como «primer acercamiento positivo» esta reunión, que ha durado media hora y que ha servido, apuntan, para intentar desbrozar un camino, el del pacto de progreso, que se ha convertido en un auténtico pedregal. Puig ha insistido esta mañana en que el acuerdo «no puede esperar» y ha de estar cerrado antes del viernes». El sábado se constituyen los ayuntamientos, dos días después de que lo hagan las Corts Valencianes.
