Dieciséis días después de las elecciones autonómicas, los tres líderes del bloque de izquierdas se reúnen por primera vez. Ximo Puig, Mónica Oltra y Rubén Martínez Dalmau se sentarán hoy con todo por hacer. Ni siquiera se han puesto de acuerdo sobre la presidencia de las Corts y los cargos de la Mesa, a pesar de que en 48 horas ha de constituirse y todo apunta a que se hará de manera provisional, por unos días, como en 2015. Los socialistas no lo querían así, pero los socios han defendido que forme parte del grueso de la negociación que hoy comienza. El pastel no se trocea.
Con la campaña de las municipales del día 26 copando las agendas, en las últimas horas no ha habido movimientos relevantes de aproximación entre PSPV, Compromís y Unidas Podemos. Todos los frentes continúan abiertos. Ni tan solo se ha producido una asunción pública por parte de la formación valencianista de que Puig vaya a repetir al frente del Consell. Se da por hecho (al menos así lo ven los socialistas) tras ser el candidato más votado y aumentar su ventaja (suma más escaños que Compromís y los morados juntos), pero los socialistas han insistido en el reconocimiento de Puig como president y no han conseguido nada.
La reunión debe ser el pistoletazo de salida de la negociación, pero no hay un calendario definido de momento. Ni comisiones negociadoras establecidas. Se espera al menos que la reunión de esta mañana en las Corts marque un clima de entendimiento, que no ha terminado de aparecer tras las primeras conversaciones privadas para la Mesa de las Corts. Las diferencias internas en Compromís después de que Enric Morera se ofreciera para continuar tampoco han ayudado a acercar posturas. Manolo Mata (PSPV) afirmó ayer que el puesto debería ser para la coalición, pero que si antes del jueves no hay propuesta, nombrarán a un socialista, a sabiendas de que será eventual.
No hay calendario tampoco de la negociación, pero se puede deducir de las declaraciones de los líderes que la solución final no llegará antes del 26 de mayo.
Compromís espera que del encuentro de hoy pueda salir una definición de grandes objetivos. Con Oltra de campaña ayer en la Vega Baja, la formación destacó el cambio climático como aspecto troncal del nuevo Botànic y la recuperación de las concesiones sanitarias privatizadas. La próxima que vence es la del área de Torrevieja.
Los tres partidos de izquierda están obligados a entenderse, pero si en 2015 tardaron 18 días en sellar un acuerdo programático, el proceso se ha ralentizado.
Los tres líderes tuvieron la semana encuentros informales por separado. De lo poco que se puso sobre la mesa fue descentralizar el pacto y llevarlo a Alicante. No obstante, la propuesta de Podemos de Pacte del Montgó no es definitiva.
