Los reproches entre partidos sobre el proceso independentista centraron el debate de TV3 del pasado martes por la noche sobre las elecciones europeas y relegó los temas de la UE a un segundo plano. Ahora bien, el uso de las lenguas cooficiales se colaron en un debate en el que participó el candidato del PP, el valenciano Esteban González Pons, quien protagonizó un conato de rifirrafe con el candidato de ERC, Jordi Solé.

La diatriba se produjo cuando Solé se dirigió a los partidos del 155 para exigir que el catalán deje de estar discriminado en las instituciones europeas. Así solicitó que los eurodiputados catalanes puedan ejercer su labor usando la lengua propia. Esteban Gónzález replicó a Solé que estaba de acuerdo con su propuesta, pero también pidió que se usara el valenciano, "que es lo que estoy hablando ahora". El cuestionamiento de la unidad de la lengua no fue contestada por los candidatos.