Una campaña electoral prenavideña, ya de por sí algo descafeinada para los ciudadanos, solo la ha conseguido animar, y de forma negativa, la acción de los vándalos que la madrugada del domingo al lunes se divirtieron manchando con pintadas las sedes de Esquerra Unida y Compromís en la ciudad de Gandia.

Las dos aparecieron ayer por la mañana con pintadas en contra de estas formaciones, que, dicho sea de paso, no concurren unidas a las elecciones generales, aunque sí que están integradas en Més Gandia, formación integrada en el Gobierno local de la ciudad junto al PSPV.

En los dos casos, los locales están decorados con grafitis que forman las siglas de las formaciones. Los atacantes han manchado esos diseños con un spray de color azul, la misma pintura usada en las dos acciones.

En el caso de la puerta de la sede de EUPV, han dibujado una diana, como ya han hecho en varias ocasiones en la sede del Partido Popular de Gandia, que también ha sufrido infinidad de ataques en los últimos años, y del estilo de la que en una ocasión apareció en la fachada del edificio en la que vive el exalcalde de Gandia, Arturo Torró, cuando estaba al frente del consistorio, en la pasada legislatura. En la sede de Compromís, ubicada en la calle Tossal, enfrente del edificio de la Universitat de València, han pintado una cuatribarrada, símbolo independentista, tachada y, además, han escrito al lado de Compromís, la palabra «puta» formando, de ese modo, la expresión «Puta Compromís». Al respecto, la coordinadora de EU, Marga Sanz, lamentó ayer que «nuevamente» una sede de su formación haya sufrido este tipo de vandalismo, y dijo que las autoridades «no deben mirar hacia otro lado» ante acciones de este tipo. Durante la pasada legislatura, en el que el Partido Popular de Gandia tiene su sede, en el paseo de les Germanies, fue atacado en un gran número de ocasiones. Los vándalos pintaron los cristales pero también el escalón de la entrada e incluso la acera, con frases en contra de la formación.

Las dos formaciones han puesto los hechos en conocimiento de las autoridades para que traten de hallar a los autores. Se sospecha que podrían ser, incluso, los mismos que en ocasiones anteriores atacaron las sedes de los populares. Los incidentes empañan una campaña electoral recién inaugurada.