Diez minutos. Eso fue lo que duró el histórico encuentro entre Joan Ribó y el líder de Vox, José Gosálbez. Dice este último que la reunión fue «correcta» y que hablaron poco de gobierno. Casi pasaron más tiempo con los periodistas que con el alcalde, ya que acudieron al consistorio con bastante tiempo de antelación y sin saber muy bien donde debían colocarse para entrar en Alcaldía.