El mercado empresarial, el desarrollo de la sociedad y la evolución del entorno laboral transforman los diversos escenarios profesionales cada día a un elevado ritmo. Tanto el profesional, que ya posee experiencia, como el estudiante recién egresado, requieren una formación constante que les permita estar a la vanguardia de las nuevas tendencias. Para la mayoría de ellos, actualmente la preparación en una rama concreta y la dedicación en exclusiva es una tarea pendiente que suele retomarse coincidiendo con el inicio de curso.
Por su parte, las empresas también incrementan la demanda de perfiles cada vez más especializados que sean capaces de desenvolverse con agilidad y destreza en un contexto etéreo. El futuro laboral de los líderes del mañana se configura repleto de nuevos retos tecnológicos, digitales, sociales e incluso actitudinales. De hecho, los últimos datos de la Comisión de la Unión Europea apuntan a que el próximo año se precisarán más de 900.000 empleos relacionados con el sector digital.
Y es que, el trabajo es el pilar sobre el que se han estructurado las sociedades modernas desde la Revolución Industrial por su valor como creador de riqueza y por su función reguladora de estados, como establece la economista Ana María Pérez en el proyecto "La transformación del mercado laboral y sus efectos en el trabajo: Contratación de empleo atípica y economía de las plataformas en España".
La importancia de la especialización
La innovación tecnológica, junto a la aparición de nuevos modelos de negocio como la economía colaborativa o las plataformas virtuales, crean precedentes tanto de empleo como de tipología de trabajo.
En este contexto, la concepción del trabajo se ha tornado más volátil y el mercado más competitivo. Así, las competencias y prácticas convencionales dan paso a nuevas profesiones y perfiles de trabajadores. Tanto es así, que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) alerta de que solo uno de cada cuatro trabajadores obtiene un empleo bajo las condiciones tradicionales.
Con el desarrollo de la economía digital y el capitalismo cognitivo, característico de las sociedades postindustriales, "el valor del trabajo quedará supeditado a la capacidad que tengan los trabajadores de ser flexibles y de adaptarse a las circunstancias y devenires de los mercados", apunta Pérez en su monográfico.
Ahora mismo, el factor humano está cobrando mucha fuerza y el foco de todas las miradas se dirige hacia las conocidas como soft skills. La aparición continua de nuevas líneas de desarrollo profesional, las profesiones emergentes y la gran velocidad a la que se mueven los bienes y servicios con motivo de la globalización han desencadenado que las empresas demanden habilidades cada vez más esenciales como la capacidad de trabajar en equipo, planificar tareas y gestionar la resolución de problemas, así como las destrezas para relacionarse, comunicarse o saber liderar un proyecto o implantación.
En este sentido, la vorágine de la globalización requiere de trabajadores capaces de comunicarse en dos o más idiomas, con una elevada capacidad creativa y un dominio de las tecnologías digitales como interfaces, artes gráficas o programación.
Universidad Europea de València, el mejor recurso
Conscientes de los nuevos parámetros, la Escuela de Postgrado de la Universidad Europea de Valènciaconfigura una oferta educativa a medida para el curso 2019-2020 en la que mantiene su apuesta por un modelo educativo basado en la excelencia, a la par que potencia el desarrollo de las capacidades del individuo.
Entre sus avales, el centro educativo puede presumir de ofrecer un índice de empleabilidad del 90 % entre su alumnado, así como una voluntad de internacionalizar el proceso académico con una tasa de alumnos y alumnas extranjera que alcanza el 24 % y procede de hasta 88 nacionalidades.
Evento Architecthon en la Universidad Europea
Muestra de ello, son las nuevas titulaciones que ofrecerá este nuevo curso en concordancia con las tendencias del mercado laboral y que, a su vez, posibilitan una especialización en ámbitos tan diversos como el sanitario, el empresarial, el jurídico u otros de gran demanda.
Así, su completa y vanguardista oferta formativa se materializa en 91 grados, 155 másteres, cuatro programas de doctorado y 22 ciclos formativos. Estos programas se fundamentan en los principios de internacionalidad, innovación y especialización. Todos ellos, dirigidos a perfiles acostumbrados al cambio, con facilidad a la hora de adaptarse a nuevos contextos y con un elevado grado de exigencia.
— Máster en Gestión del Negocio Marítimo y el Derecho Marítimo
Está enfocado en la formación de profesionales capacitados para trabajar y desenvolverse en puestos directivos de empresas del sector marítimo portuario.
Actualmente, el puerto de la Comunidad Valencia es uno de los más importantes a nivel nacional, la evolución de su logística y los nuevos retos que afronta el sector configuran un área en crecimiento exponencial y que alberga grandes oportunidades.
— Máster en Fisioterapia del Sistema Nervioso
Basado en los últimos avances científico-técnicos en el campo de la neurorehabilitación, este máster del ámbito de la salud destaca por desarrollar la capacidad investigadora de su alumnado, que podrá realizar prácticas asistenciales en unidades de neurorehabilitación en hospitales y en clínicas.
— Máster en Responsabilidad Social Corporativa
La ética y responsabilidad social es otro de los nuevos espacios estratégicos para la supervivencia de cualquier empresa que brota con fuerza. Para ello, se pone en marcha este máster enfocado a dar respuesta desde un punto de vista estratégico y empresarial a las necesidades sociales y corporativas.
— Postgrado Experto en Retail y Gestión del Punto de Venta
Otra de las novedades a destacar reside en este postgrado que permite abarcar todos los procesos que intervienen en el desarrollo de un modelo de negocio Retail, experimentando mediante un proceso práctico, desde la concepción estratégica del modelo hasta la gestión de la experiencia del consumidor.
