El Gobierno alcanzó ayer un acuerdo con las comunidades autónomas sobre el plan de austeridad para reducir el gasto público hasta el 3% en 2013, en una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).

La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, explicó en rueda de prensa que los representantes autonómicos han aprobado el acuerdo marco para la sostenibilidad de las finanzas públicas para el periodo 2010-2013, que les fue remitido por el Ministerio de Economía y Hacienda el pasado 3 de febrero.

Además, para el desarrollo de estos objetivos, las comunidades autónomas se han comprometido a elaborar, en el plazo de tres meses, planes de racionalización y eficiencia del gasto. Para ello, se ha acordado la constitución de un grupo de trabajo en el seno del CPFF que se encargará de hacer propuestas en materia de reducción y mejora de la eficiencia del gasto y al que se encomendará la valoración y seguimiento de la información solicitada a las comunidades autónomas.

Por otro lado, Salgado, que ya comentó hace unas semanas que el déficit de las cuentas públicas en 2009 fue inferior al 11,4% inicialmente previsto, apuntó que el saldo negativo de las comunidades autónomas ha sido finalmente dos décimas inferior, con lo que el déficit quedó situado en el 11,2%.

En el CPFF se aprobaron además los planes de reequilibrio de nueve comunidades autónomas, que suponen una reducción del gasto de 1.975 millones de euros. Sin embargo, las comunidades autónomas gobernadas por el PP coincidieron en la "filosofía de la austeridad" presupuestaria y el control del gasto, pero se abstuvieron a la hora de votar el plan del Gobierno para este fin al considerarlo "solamente propaganda y humo".

Así, el conseller de Economía y Hacienda de la Generalitat valenciana, Gerardo Camps, destacó, tras asistir al CPFF, que aunque les parece "lógico y prudente" reconducir el déficit, se han abstenido en el voto debido a la ausencia de "medidas concretas" y la creación de grupos de trabajo, "sin ningún objetivo a alcanzar de inmediato".

El conseller indicó que aunque todas las comunidades gobernadas por el PP comparten el criterio de que hay que reducir el déficit y el endeudamiento, por "lo impreciso, vago e inconcreto" del plan, "no podían votar a favor". Asimismo, Camps resaltó que, en la reunión, en uno de los puntos centrados en la creación de grupos de trabajo, la Comunitat votó en contra, porque, según indicó el conseller, ya está "todo estudiado y se conoce el diagnóstico", por lo que hay que tomar "medidas concretas".

"No podemos perder el tiempo"

El conseller indicó que han solicitado mantener otra reunión del CPFF la próxima semana para poner "propuestas concretas sobre la mesa" y han recibido la negativa del Gobierno, para, en su lugar, proceder a la creación de grupos de trabajo y después tomar medidas.

"No estamos para perder el tiempo", subrayó el titular de Economía del Consell, quien aclaró que la Comunitat participará en los grupos de trabajo pero para "dejar claro" que lo que hay que hacer es "tomar decisiones".

Asimismo, el conseller criticó la "descoordinación e incertidumbre" del Ejecutivo, durante la reunión de ayer, ya que se les transmitió que el acuerdo, aprobado en el Consejo de Ministros, no se podía cambiar y después, se ha votado un nuevo grupo de trabajo que no estaba contemplado en el acuerdo. Por ello destacó que "este tipo de incorrecciones e incertidumbres tampoco ayudan".