?

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguraba ayer mismo que la intervención del Rey "pone en valor lo que representa la sanidad pública española". Pero hay ligeros matices. En el transcurso de la rueda de prensa ofrecida por el equipo médico el sábado una periodista preguntó: "¿El Rey ha sido operado en el hospital público o en su área privada?". De manera un tanto ambigua, el responsable del centro contestó: "Ha ingresado como paciente del Clínic". Esta aparente inconcreción, y la pregunta, tienen su explicación: Don Juan Carlos puso su salud -por consejo de sus médicos, como se ha explicado- en manos de la sanidad pública -el centro está gestionado por la Generalitat de Cataluña- pero tras la intervención ha sido acomodado en las instalaciones privadas.

El Rey ocupa, en concreto, las habitaciones de la planta séptima de Barnaclínic, que cuenta con una escalera de acceso propia. Los responsables del Clínic ofrecieron también la justificación, al ser interrogados acerca de si se habían cerrado plantas del hospital: Don Juan Carlos ha sido acomodado en un lugar adecuado "por razones de seguridad y confort" sin alterar la marcha del centro.

Barnaclínic, que funciona desde el año 200o, es una especie de "filial privada" del Clínic, tiene gestión particular pero utiliza las instalaciones, equipamientos y el personal médico del hospital. La diferencia es que el paciente paga y los médicos trabajan fuera de su horario funcionarial, algo que han denunciado en ocasiones los sindicatos. Ha acogido a pacientes VIP como Esther Koplowitz o la baronesa Thyssen. Las habitaciones cuentan con interfono, alarma en el lavabo, control de temperatura y luz nocturna e Internet.