?
El lehendakari, Patxi López, anunció ayer que asume personalmente el impulso y la coordinación de todas las acciones incluidas en el Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia aprobado ayer por el consejo del Gobierno vasco en Gernika (Vizcaya). El lehendakari aseguró que para sacar adelante este plan no ha buscado "adhesiones acríticas" de partidos políticos, asociaciones y agentes educativos, sino "colaboraciones activas que encaucen las discrepancias". López mantuvo que el plan es "una relectura constructiva" del Plan Vasco para la Paz y los Derechos Humanos aprobado por el anterior Gobierno vasco de Ibarretxe.
López explicó que uno de los "principios básicos de la reformulación" consiste en "poner el foco en el problema de terrorismo que vive Euskadi" y subrayó que "para lograr el fin definitivo del terrorismo no es suficiente detener a terroristas, sino que hay que deslegitimar el ejercicio del terrorismo". Tras recordar que, según un reciente estudio, un 15% de la juventud vasca no rechaza el terrorismo, insistió en que deslegitimar el ejercicio del terrorismo supone "denunciar la injusticia y la ilegalidad de utilizar la violencia con fines políticos". Sobre la presencia de las víctimas en la aulas, uno de los aspectos que más polémica ha levantado de este plan, defendió que "el testimonio de las víctimas es un recurso valioso para socializar un sufrimiento injusto".
"Acabar con ETA está a huevo"
Por su parte, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, aseguró ayer que está "a huevo" acabar con la banda terrorista ETA pero emplazó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a que no caiga "en la tentación" de buscar "la gloria política" con este tema.
A su juicio, "no hay ninguna excusa para estropearlo en este momento", como a su entender, ocurriría si se permite a ETA estar presente en las elecciones de 2011. Por ello, insistió en que "lo importante no es el nombre del presidente del Gobierno que acabe con ETA, sino cómo lo haga", argumentó. "La victoria no será de un presidente o de un partido, sino de las víctimas y de los demócratas".
