El Congreso admitió ayer a trámite por unanimidad la Proposición de Ley que prohibirá fumar en espacios públicos cerrados, aunque recibió las críticas de algunos grupos, entre ellos el PP, por ser escasamente ambiciosa en la promoción de la salud y por el modo en que ha sido presentada.La iniciativa, consensuada por PSOE, IU-ICV y ERC, atravesará ahora "un debate profundo y sosegado para que, sin perder su objetivo fundamental, se consiga un texto lo más consensuado posible", en palabras de la socialista Pilar Grande.

La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, volvió a proponer enero de 2011 como fecha de entrada en vigor de esta modificación legislativa, que contiene un artículo único dirigido a liberar del humo a los bares, locales de ocio y establecimientos de la hostelería.

En el borrador quedan exentas de la prohibición de fumar algunas habitaciones de los hoteles, los clubes de fumadores y los espacios donde haya personas recluidas, como cárceles y psiquiátricos, que tendrán que habilitar espacios para fumadores.

Jiménez agradeció a los otros portavoces "el tono constructivo" con el que han debatido la propuesta en el pleno de la Cámara Baja así como el que hayan manifestado que "están de acuerdo con el fondo de la proposición". "Esto supone un gesto de madurez política, parlamentaria y social", sentenció, para insistir en que el clima social es "muy favorable" para poder "ir más allá y ser más ambiciosos" en el cumplimiento de la Ley, consiguiendo "un importantísimo objetivo de salud pública".

El diputado del PP Mario Mingo respaldó que se debata esta iniciativa "buscando más lo que nos une que lo que nos desune" pero advirtió de que con ella no se reducirá el número de fumadores. Recordó que en 2006, cuando entró en vigor la Ley que ahora se modifica, fumaban el 26% de los españoles y actualmente lo hacen un 27%.

Pérdida de 100.000 empleos

Pero la reforma de la ley antitabaco podría provocar el cierre de 30.000 establecimientos y la pérdida de hasta 100.000 puestos de trabajo en toda España, según aseguró el secretario general de la Federación Catalana de Asociaciones de Actividades Recreativas Musicales (Fecasarm), Joaquím Boadas.