La consellera de Justicia, Montserrat Tura, ha informado de que ya se han identificado a las doce víctimas del accidente ferroviario de Castellsdefels, a la espera de contrastar el ADN de una joven rumana de 30 años, para lo que se ha solicitado la ayuda de la Interpol y las autoridades de Rumanía.

De las 12 víctimas, 11 son de origen latinoamericano: seis ecuatorianos, dos colombianos, dos bolivianos y un fallecido más de origen sudamericano del que la familia no ha querido difundir los datos. A ellos se suma la mujer rumana. Entre todos, hay tres mujeres y nueve hombres, todos con edades comprendidas entre los 17 y los 39 años y residentes en Catalunya.

La confirmación tardará varios días por la dificultad de encontrar muestras de ADN con las que cotejar su identidad. Los documentos de identificación rumanos no incluyen huellas dactilares y la mujer no tiene familia directa en España, por lo que la conselleria se ha puesto en contacto con la Interpol, que ya ha solicitado a la familia muestras para cerrar el proceso.

La cifra de fallecidos se elevó a 13 porque se encontró dos partes humanas que parecían de dos personas diferentes. Sin embargo, tras realizar las pruebas de ADN, se comprobó que pertenecían al mismo. En un primer momento se barajó la posibilidad de que los dos restos pertenecieran a una pareja de gemelos univitelinos, el único caso en el que dos cuerpos pueden tener el mismo código genético. La hipótesis estaba reforzada por la aparición, en las horas posteriores a la tragedia, de una familia que no encontraba a unos gemelos.

Por ahora, y aunque todas las familias han sido informadas, la repatriación de cuerpos aún tendrá que esperar. Según Tura, aunque los restos mortales de mayor dimensión han sido identificados --lo que permite asignar identidades-- muchos aún no han sido asignados a una identidad, por lo que se tardará en entregar los cuerpos a las familias. "Algunos restos están muy fraccionados", lamentó.

Además, varios centenares de ecuatorianos se han concentrado esta tarde en el Arco del Triunfo de Barcelona en recuerdo de las víctimas, y el embajador de Ecuador en España, Galo Chiriboga, se ha acercado a las capital catalana para ofrecer personalmente su ayuda a los familiares de los fallecidos, y ha declarado que espera que la investigación sobre el siniestro acabe "cuanto antes".

El juez de Gavà también ha dictado una interlocutoría donde ordena la clonación de la caja negra del tren que atropelló a las víctimas para que esté a disposición de las empresas o administraciones que hacen investigaciones internas.

Respecto a los 10 heridos aún hospitalizados por el siniestro, dos de las mujeres que fueron hospitalizadas en el hospital de Bellvitge en estado grave han pasado hoy a menos graves debido a su evolución positiva. Se trata de una mujer de 25 años con fractura de pelvis y de otra joven, de 18 años, con fractura de tibia y peroné y traumatismo craneal. Los otros ocho heridos evolucionan también de forma favorable, según ha informado el departamento de Salud de la Generalitat. De los diez heridos, dos se encuentran en estado grave, dos en estado menos grave y el resto son heridos leves.