El objetivo es financiarse, ya que a la Generalitat le faltan 3.000 millones de euros para cumplir con el programa de la Administración catalana para 2010. Para ello, el Gobierno catalán emitirá bonos para particulares por un importe de 1.000 millones de euros, a razón de 1.000 euros por título. La oposición catalana no ha tardado en hacerse eco de la noticia, afirmando que es una muestra del mal estado de las finanzas del Govern.

El presidente de CiU, Artur Mas, no criticó la medida, pero aseguró que la medida demuestra que la administración catalana está "pelada y apurada".

Cajones llenos de facturas

"No habrá dinero, habrá muchas deudas y encontraremos los cajones llenos de facturas por pagar", expuso el líder convergente, durante la presentación en Palamós (Girona) del próximo candidato de CiU a la alcaldía del municipio.

Mas añadió que este hecho introduce "una dificultad añadida" al futuro presidente de la Generalitat catalana. Ante esta situación, definió la gestión financiera del tripartito como "una tormenta de truenos y relámpagos que dejará inundada a la Administración catalana de deudas". Por lo que si "está inundada de deudas", el próximo gobierno tendrá que ponerse botas de agua, coger bombas potentes y reflotar el gobierno para que vuelva a navegar. "Lo conseguiremos, aunque no sabemos cuánto tardaremos", concluyó. Mas también recordó cuáles serán sus principales objetivos si consigue, "a la tercera", la presidencia de la Generalitat. La primera prioridad será "levantar el país económicamente, un hecho que no será fácil". Dijo que para mejorar la economía también será imprescindible reducir el número de parados. Y finalmente, también lo será disminuir el número de estudiantes con fracaso escolar, puntualizó el presidente de CiU.

En el proyecto, que liderará La Caixa, participan una quincena de entidades, las "más importantes", como Catalunya Caixa, Unnim, el Banco Sabadell, el BBVA y Caja Madrid.

La conselleria de Economía considera el proyecto como "una muestra de confianza a las entidades y del mercado", coincidiendo con "un momento complicado para todas las administraciones públicas".

Huguet: "Es una buena oferta"

Por su parte, el conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet (ERC), defendió la medida, calificándola como "una buena oferta", porque se garantiza un interés superior al que ofrecen los bancos. Huguet también resaltó que la medida, que "ya se ha tomado en otros momentos de la historia", también contribuirá a que "el país se relance a comprar". Añadió que el conseller de Economía tiene la obligación de buscar fórmulas de financiar la deuda.