La Armada española ha recogido las boyas colocadas en el entorno de las aguas de Gibraltar para el estudio de las corrientes marinas después de la exigencia del Gobierno del Reino Unido de que fueran retiradas.

El buque hidrográfico "Malaspina" procedió ayer, miércoles, a quitar las balizas una vez concluido el estudio científico elaborado para la Universidad de Cádiz que comenzó hace un mes, han informado a Efe fuentes de la Armada.

Según la Marina española, se ha procedido a recogerlas una vez que ha concluido la campaña, cuyo fin era hacer un seguimiento de las corrientes en la bahía con el fin de garantizar la seguridad del tránsito de barcos en la zona.

Las boyas estaban fondeadas en el perímetro de las tres millas que el Reino Unido reivindica como aguas territoriales de Gibraltar, en contra de la tesis del Gobierno español.

Lanchas de la Royal Navy de Gibraltar supervisaron la retirada de las balizas, que fueron situadas el pasado 21 de septiembre.

El secretario para Europa del Reino Unido, David Lidington, exigió al Gobierno español que se retiraran en un acto celebrado en Londres el pasado lunes en presencia del ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana.

Al día siguiente, el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, aseguró que las boyas se recogerían en breve cuando el buque hidrográfico concluyera su estudio científico.

En opinión de Moratinos, la retirada de las balizas no cabía interpretarla como un "gesto", ni como deseo de "contentar a unos ni a otros".

El litigio por la soberanía de las aguas que rodean a Gibraltar ha provocado la suspensión de las reuniones técnicas previas al encuentro ministerial del Foro de Diálogo previsto para antes de fin de año en Madrid.

El deseo de los Gobiernos de España, Reino Unido y Gibraltar es que esta cita se pueda celebrar, pese a las discrepancias sobre el dominio de las aguas y los incidentes ocurridos entre las patrulleras de la Guardia Civil y de la policía de la colonia.

La intención es que de esa reunión salgan acuerdos en materia de cooperación marítima y policial, educación, fiscalidad y visados, dejando a un lado el asunto de la soberanía.