El eurodiputado del Partido Popular (PP) Jaime Mayor Oreja auguró hoy en Lima una presencia de la izquierda abertzale en las próximas elecciones municipales españolas, lo que, según él, es grave porque significa introducir en las instituciones "un proyecto de ruptura de España".

El ex ministro del Interior (1996-2001), que se encuentra en Lima para impartir una conferencia en una universidad privada, no utilizó la palabra "negociación", pero dijo que "hay un proceso puesto en marcha hace tiempo" entre el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y la organización terrorista ETA, y la admisión de la izquierda abertzale en las elecciones de mayo es parte de lo acordado.

El gobierno socialista -dijo en una entrevista con Efe- "ha escondido el proceso por temor a la reacción de la oposición y de la sociedad" y alertó contra las supuestas diferencias entre ETA y la izquierda nacionalista, que, según él, son "una ficción" necesaria para que la negociación sea posible.

"No existe izquierda abertzale distinta a ETA", recalcó el político popular, para quien la supuesta legalización política de estos partidos es "una baza del gobierno (socialista) para ganar en el último minuto una elección que hoy está perdida".

Mayor Oreja recordó que ETA es algo más que un grupo terrorista, "es un proyecto de romper España", y permitir la entrada de sus aliados en los ayuntamientos vascos "les da un nervio político enorme".

Para él, el error es considerar que contra ETA no basta con utilizar el estado de derecho "y nada fuera de la ley", postura del PP, sino creer que "hay que hacer más cosas, y eso es lo que han hecho todos los socialistas" al impulsar la negociación con ETA con la llegada de Zapatero al gobierno y volverlo a intentar ahora.

Además, alertó contra lo que llamó "vaivenes" de la sociedad española: "ETA, que es un termómetro de la fortaleza o debilidad de España, está viendo que España es incapaz de mantener una misma política 15 años seguidos, pues cada vez que hay nuevo gobierno, cambia la política sobre ETA".

El político popular subrayó que "las treguas de ETA nunca fueron gratis", y enmarcó dentro de estos supuestos "réditos" conseguidos por el grupo terrorista el hecho de que la autodeterminación haya sido asumida dentro del debate en el País Vasco y Cataluña.

Por último, criticó además que en los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero los interlocutores de ETA no sean actores terceros, sino el propio gobierno.