La corrupción y el fraude son ya el segundo problema nacional por detrás del paro, según el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), correspondiente al mes de febrero, la primera encuesta de este tipo realizada tras el estallido del 'Caso Bárcenas'.

El estudio fue elaborado entre el 4 y el 12 de febrero, en pleno caso Bárcenas y otros asuntos de corrupción como el espionaje político en Cataluña, y señala que la corrupción y el fraude pasa de preocupar al 17,7 por ciento de los españoles en enero al 40 por ciento en febrero, sólo por detrás del paro, que preocupa al 79,9 por ciento, un punto menos que hace un mes.

Hasta ahora, la cifra más alta de corrupción y fraude había sido el 33,5 por ciento constatada por el CIS en enero de 1995.

Según el barómetro de febrero, los problemas de índole económico pasan al tercer lugar, por detrás de la corrupción y el fraude, citados por el 35,4 por ciento (38,9 por ciento en enero).

Mientras tanto, los políticos y los partidos bajan un escalón y se colocan en la cuarta posición, enumerados por el 29,7 por ciento (30,2 por ciento el mes pasado).

En línea con las preocupaciones ciudadanas, el instituto demoscópico aprecia un repunte significativo de aquellos que ven "mala" o "muy mala" la situación política, un 85,7 por ciento, frente al 77,4 por ciento de enero.

Quienes la ven "buena" o "muy buena" son un 1,4 por ciento, casi la mitad que hace un mes, que era del 2,6 por ciento.

Tampoco tiene mucha esperanza de que mejore en el futuro el 37,9 por ciento de los sondeados (el 33,4 por ciento opinaba así en enero pasado), aunque el 9,7 por ciento confía en que dentro de un año el panorama político será mejor (antes era del 12,7 por ciento).

El CIS también se ha interesado por conocer la opinión de los ciudadanos respecto a hace un año y el 55,9 por ciento cree que la situación política en general está peor que entonces y sólo al 3,6 por ciento le parece que es mejor.

Preguntados por la situación económica, aumenta el número de españoles que la perciben como "mala" o "muy mala", ya que esos grupos suman 92,3 por ciento, frente al 90,8 por ciento que lo veía así el mes anterior.

Se mantiene en un porcentaje similar el de quienes la ven "buena" o "muy buena", con un 0,7 por ciento, y descienden ligeramente quienes opinan que es "regular", el 6,8 por ciento (8,3 por ciento en enero).

También son más pesimistas los encuestados sobre el futuro económico, puesto que el 41,2 por ciento se teme que dentro de un año la economía estará peor (40,2 por ciento en enero), y baja el número de quienes creen que mejorará, que pasa del 19,2 por ciento del mes anterior al 14,5 por ciento de la encuesta actual.

Para el 68,8 por ciento de los entrevistados, la coyuntura económica actual es peor que hace un año, en tanto que el 3,6 por ciento opina que es mejor.

Respecto a las preocupaciones de los españoles, la sanidad sigue como la quinta inquietud, aunque mejora ligeramente respecto al mes anterior (del 12,1 de enero al 10,5 por ciento), seguido de la educación (del 5,8 al 7,8 por ciento).

Tampoco hay variaciones en los puestos que ocupan la inquietud por los bancos (séptima) y los recortes (octava).

En el caso de los bancos, es citado como problema por el 5 por ciento de los ciudadanos (hace un mes era el 5,8 por ciento), mientras que los recortes bajan del 5,4 al 4,2 por ciento.