La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afirmado que "no hay ninguna ruptura" con José María Aznar y ha añadido que el Ejecutivo "respeta y mucho a todos los expresidentes del Gobierno".
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría ha respondido así al ser preguntada si el Gobierno da por rotas las relaciones con José María Aznar.
El expresidente ha dicho hoy que, si las interpretaciones que se hacen de que la ausencia de miembros del Ejecutivo en la presentación ayer del segundo volumen de sus memorias pretende escenificar una ruptura con él, "toma nota".
Sáenz de Santamaría ha explicado que ella no acudió ayer al acto porque se encontraba "cerrando" el Consejo de Ministros de hoy y que acudió una persona de su equipo, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón.
"No hay ninguna ruptura", ha asegurado la vicepresidenta, quien ha añadido que el Ejecutivo "respeta y mucho a todos los expresidentes del Gobierno, en especial a Aznar".
Ha señalado que "muchos de los que trabajaron en su equipo están en este Gobierno", en referencia al ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, que fue secretario de Estado.
"Desde luego para nosotros la opinión de los expresidentes del Gobierno, en especial de Aznar, siempre la tenemos muy en cuenta", ha añadido.
Política antiterrorista
Al ser preguntada de nuevo por este asunto y, en concreto, por las opiniones de Aznar sobre la política antiterrorista del Gobierno, ha señalado que no es su tarea hacer "comentarios" de todas las opiniones que se viertan sobre el Ejecutivo.
Y ha destacado que en política antiterrorista el Gobierno "lo tiene muy claro: ni negocia ni negociará con ETA".
"Los terroristas sólo tienen un fin: disolverse incondicionalmente", ha matizado.
Respecto a las opiniones de Felipe González, que se ha ofrecido a ayudar a Mariano Rajoy, ha insistido en que el Ejecutivo no va a valorar los comentarios de expresidentes del Gobierno.
"Son instituciones que hay que respetar, por su labor", ha dicho.
Ha explicado que su Gobierno accedió al poder "en un momento difícil y complicado" y que "ha evitado que España se viera sometida a decisiones muy duras, como un rescate".
Sáenz de Santamaría ha apuntado que el Gobierno lleva a cabo un plan nacional de reformas que está "en grado muy avanzado de ejecución" y ha añadido que "con timidez y mucha prudencia empiezan a verse datos macroeconómicos que son positivos".
"Es la línea que tenemos que seguir sin distraernos", ha finalizado.
