La Audiencia Nacional ha dictado sendas órdenes internacionales de detención contra el expresidente chino Jiang Zemin y otros cuatro exdirigentes de ese país, dentro de la causa en la que investiga la represión del régimen comunista de China sobre los habitantes de Tíbet.

La sección cuarta de la Sala de lo Penal dicta en un auto las órdenes de arresto, que también afectan a Li Peng, primer ministro chino a finales de los años 80 del siglo pasado y principios de los 90; Qiao Shi, exjefe de la seguridad china y responsable de la policía armada popular; Chen Kuiyan, secretario del Partido Comunista en la región autónoma del Tíbet entre 1992 y 2001 y a Peng Pelyun, ministro de Planificación Familiar de China en los años 80.

Esta causa se abrió después de que el Comité de Apoyo al Tíbet y la Fundación Casa del Tíbet presentaran una querella dirigida contra siete dirigentes chinos, entre ellos el expresidente Hu Jintao, sobre quien la Audiencia Nacional no ha dictado hoy orden de detención.

Con estas órdenes internacionales de búsqueda y captura, la sección cuarta -compuesta por los magistrados Ángela Murillo, Carmen Paloma González y Juan Francisco Martel- revoca la decisión del juez de instrucción Ismael Moreno, que el pasado mayo acordó que no procedía la detención de estas personas porque las diligencias practicadas no permitían deducir que participaran en los hechos denunciados.

En cambio, la sala cree que de lo investigado hasta ahora sí se deduce "la existencia de indicios en la participación en los hechos objeto de la querella en las personas de los mencionados, habida cuenta de la responsabilidad política o militar de cada uno de ellos en el largo periodo a que se remontan los hechos objeto de la investigación".

La querella que dio origen al procedimiento fue admitida a trámite en enero de 2006, cuando la Audiencia Nacional se declaró competente para investigar el genocidio denunciado ante la imposibilidad de que pueda ser investigado por tribunales chinos o por el Tribunal Penal Internacional.

A los querellados se les acusa de un delito de lesa humanidad por dirigir un ataque "generalizado y sistemático contra la población tibetana" en los años comprendidos entre finales de la década de los 80 del siglo pasado y principios de los 90.

La Audiencia Nacional investiga este asunto porque el tercer querellante es el lama Thubten Wangchen, que tiene la nacionalidad española.