La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, ha defendido este viernes que la grabación de su almuerzo con la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola Victoria Álvarez fue "ilegal", y ha acusado a los partidos de querer desprestigiarla.

En su intervención inicial ante la comisión parlamentaria del fraude, la evasión fiscal y la corrupción, ha remarcado que la grabación se hizo sin su consentimiento, y ha recordado que en la trama de presunto espionaje hubo otros "espiados", como la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega; el expresidente catalán José Montilla, y el conseller Felip Puig.

"¿Ustedes creen que es razonable que se espíe a tanta gente y que la única persona que comparece soy yo?", ha dicho, y ha acusado a los grupos de organizar un espectáculo para distraer la atención del objetivo de la comisión de investigar las cuentas en el extranjero de la familia Pujol.

Como prueba de que la conversación se grabó ilegalmente, ha esgrimido que la agencia de detectives Método 3 respondió a su demanda con un "allanamiento civil total" en el que reconocía que la grabación fue ilícita y fijaba una indemnización por los daños causados a su persona.

La dirigente popular asegura que, como consecuencia de su comparecencia de este viernes, se dejará de conocer ese encuentro como 'el almuerzo de La Camarga': "Será otra cosa; verán por qué. Hoy bajaremos a las profundidades".

Ha dicho que la grabación difundida entre ella y Victoria Álvarez está manipulada porque ha sido "editada" y con el orden de algunas frases cambiado, y ha precisado que la única grabación completa está consignada en el juzgado y ni siquiera han tenido acceso las partes personadas en el procedimiento. ANTECEDENTES

Camacho ha centrado gran parte de su intervención inicial --leída íntegramente durante una media hora-- en explicar por qué no compareció en la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament cuando se la citó por este mismo caso, y ha mostrado un informe de los letrados del partido que argumenta que no estaba obligada.

Ha recordado que siempre dijo que sí comparecería ante una comisión de investigación cuando se crease, y que el mismo PP planteó abrir una en el Parlament sobre la presunta trama de espionaje pero la desestimaron CiU, ERC y PSC.

Ausencia de David Fernández

La sesión de la comisión de investigación ha estado marcada por la ausencia por motivos personales del presidente, David Fernández (CUP), sustituido a lo largo de este viernes por tres miembros de la Mesa: los vicepresidentes Lluís Corominas (CiU) y Anna Simó (ERC) por la mañana, y el secretario cuarto David Companyon (ICV-EUiA) por la tarde.

El portavoz adjunto del PP, Santi Rodríguez, ha criticado que en un primer momento la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, asignase esa función a Pere Calbó (PP), y que luego "algunos se han movido muy rápido" para que no fuera así.