Los exconsellers Jordi Turull y Josep Rull y el diputado de JxCAT y exlíder de la ANC Jordi Sànchez han pedido al Tribunal Supremo que les deje en libertad, al considerar que la decisión del juez Pablo Llarena de retirar todas las euroórdenes demuestra la "endeblez" de la acusación por rebelión.

En un escrito, al que ha tenido acceso Efe, la defensa de Turull, Rull y Sànchez solicita su inmediata excarcelación, ya que entiende que la retirada de las euroórdenes contra todos los políticos independentistas huidos de la justicia española demuestra la "suma endeblez de la forzada calificación jurídica" por rebelión o sedición a partir de la cual se ha "construido" la causa.

El juez del Supremo Pablo Llarena rechazó la entrega a España de Carles Puigdemont solo por un delito de malversación, después de que la justicia alemana descartó entregarlo por rebelión, y retiró también la euroorden que pesaba contra el expresidente catalán, los exconsellers Antoni Comín, Lluís Puig, Meritxell Serret y Clara Ponsatí y contra la secretaria general de ERC Marta Rovira.

En el escrito dirigido a la sala segunda del Supremo, el abogado Jordi Pina sostiene que la "inmotivada" decisión de Llarena de retirar las euroórdenes es una "evidente razón de peso" para que Turull, Rull y Sànchez, actualmente en prisión preventiva por rebelión en la cárcel barcelonesa de Lledoners, sean puestos "inmediatamente" en libertad.

"Esta retirada inmotivada de órdenes de detención no es sino la viva muestra de la nula confianza que tiene el propio instructor en la calificación de los hechos que nos ocupan como constitutivos de delitos tan sumamente graves como la rebelión o la sedición", remarca el escrito.

En concreto, la defensa ha ampliado el escrito de petición de libertad provisional para Sànchez, Turull y Rull que presentó el pasado 16 de julio, atendiendo a las "circunstancias sobrevenidas" que supone la retirada ayer de las órdenes de detención europeas e internacionales respecto de los seis procesados por la causa del "procés" que están fuera de España.

"Dicha retirada se justifica por el hecho de que los Tribunales alemanes hayan denegado la entrega de uno de los procesados -Carles Puigdemont- por un supuesto delito de rebelión o sedición, pero la decisión se amplía a los restantes países, inclusive respecto de aquellos cuya administración de Justicia no se había llegado a pronunciar en ningún sentido, como Reino Unido o Suiza, o no había llegado a pronunciarse sobre el fondo de la petición, como Bélgica", apunta.

En este sentido, el recurso señala que el auto dictado ayer por Llarena no dedica "una sola línea" a justificar la decisión de retirar las órdenes "ni a explicar por qué su pérdida de confianza en la voluntad de cooperación de la Justicia alemana debe hacerse extensiva a estos otros países, el prestigio de cuya administración de Justicia está fuera de toda duda".

Nula confianza

Según la defensa, la retirada "inmotivada" de las órdenes de detención es la "viva muestra" de la "nula confianza" de Llarena en la calificación de los hechos -por un delito de rebelión-, una "falta absoluta de confianza" que se concreta en que "haya preferido retirar todas las restantes órdenes antes de exponerse al riesgo de que estas fueran rechazadas hasta por tres países más, cuyas jurisdicciones gozan del máximo prestigio internacional".

El escrito resalta asimismo que en Reino Unido, Bélgica y Suiza los políticos independentistas se han mantenido siempre en libertad, pese a carecer de arraigo.

La defensa de Turull, Rull y Sànchez admite que la sala segunda del Tribunal Supremo, que se va a encargar del enjuiciamiento, no puede ni debe entrar en este momento procesal en juicios de tipicidad "propios de la sentencia", a efectos de determinar la relevancia penal de las imputaciones en las que se basa la medida cautelar de prisión provisional, aunque apunta que el tribunal no debe dejar de tener en cuenta la "inmotivada decisión" de Llarena.