Laura Nuño, la que fuese directora del máster que cursó la ministra de Sanidad, Carmen Montón, en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) de Madrid ha defendido que no hubo "ninguna" irregularidad en la obtención del título y que la ministra ya enseñó su trabajo de fin de máster (TFM).

Nuño estaba citada a declarar como imputada por el 'caso máster' de la expresidenta madrileña Cristina Cifuentes, si bien su comparecencia se ha pospuesto hasta el próximo 24 de septiembre a petición de su abogado.

A la salida de los juzgados madrileños de Plaza de Castilla, la exsubdirectora del Instituto de Derecho Púbico de la URJC y directora del posgrado de la ministra ha hecho unas breves declaraciones a los medios en las que ha negado la existencia de irregularidades en el máster en Estudios Interdisciplinares de Género, tal y como afirma una información que publica hoy eldiario.es.

"Hay un trabajo de fin de máster que lo ha enseñado ella", ha señalado Nuño a los periodistas.

Según ha publicado hoy eldiario.es, el máster que Montón obtuvo en el curso 2010/2011 estuvo lleno de "irregularidades".

Superó con nota la mitad de las asignaturas sin asistir a esas clases y sin tratar con los profesores; pagó la matrícula tres meses fuera de plazo, empezó el curso cuatro meses tarde y "la fecha de su título oficial no coincide con el resto de su expediente", siempre según la versión de este periódico digital.

La ministra, entonces diputada del PSOE, obtuvo su título en el Instituto Universitario dirigido por Enrique Álvarez Conde, hoy imputado por el supuesto trato de favor a Cristina Cifuentes y Pablo Casado, y cuya número dos era Laura Nuño.

En relación al caso del máster de Cifuentes, la jueza Carmen Rodríguez-Medel ha pospuesto las declaraciones previstas para hasta las 12 de la mañana a petición de la abogada de la expresidenta regional, que tenía otro señalamiento a la misma hora.

Aparte de Nuño, que declarará en unas semanas, están citadas las tres profesoras que conformaron el tribunal del trabajo de fin de máster de Cifuentes.

Son Cecilia Rosado, Clara Souto -quien denunció que su firma había sido falsificada en el acta de notas de la expresidenta de la Comunidad de Madrid- y Alicia López de los Mozos, que mantiene la misma versión que la anterior.

Rosado será la primera vez que declare en calidad de imputada por los delitos de falsedad documental y prevaricación administrativa