El líder del PP, Pablo Casado, ha vuelto a acusar al Gobierno del PSOE de actuar con "irresponsabilidad" ante la inmigración ilegal y provocar con sus gestos un efecto llamada, y ha criticado el "buenismo" y la "hipocresía" que muestran los socialistas en este asunto.

En Algeciras, y en el mismo polideportivo que visitó hace unos meses ante la llegada masiva de inmigrantes en verano, Casado ha recordado que le llamaron populista y extremista por advertir de la inmigración ilegal y las cifras le han dado la razón: "La ruta occidental ha crecido el 150 por ciento y la del mediterráneo ha decrecido el 80 por ciento", ha dicho.

Ha lamentado que a pesar de todo se siga "insultando" a los populares y el Gobierno actúe "de forma cínica e hipócrita", porque ha dejado las concertinas que prometió quitar o promete acoger inmigrantes a los que después no atiende.

Casado ha recordado que el PP "ha vinculado siempre la inmigración ordenada al mercado de trabajo" y ha dicho que su partido ha sido el de "los gobiernos más solidarios de la historia de España" en esta materia.

Tras recordar que hace unos meses aquí en Algeciras vio a "atletas" a los que toda su aldea pagaba el pasaje a Europa a través de mafias,o a embarazadas que habían sido "esclavas sexuales" de dichas mafias para pagarse la entrada, Casaso ha insistido en que es "una irresponsabilidad apelar al efecto llamada".

Y ha defendido una "cooperación real en los países de origen, sin demagogias ni buenismo" como la que en su opinión practican los socialistas, para ayudar a esos países a desarrollarse y evitar la migración masiva.

Igualmente ha recordado que hace unos días, en el congreso del Partido Popular Europeo en Helsinki ante los líderes del centro derecha europeo, pidió ayuda de todos los miembros de la UE para afrontar la inmigración en esta frontera sur de Europa.