El PP y Cs han expuesto este lunes sus primeras intenciones en Andalucía, donde, a pesar de haber sido segunda y tercera fuerza, pretenden gobernar mediante pactos, en los que Vox desempeñaría un papel destacado, por detrás de un PSOE que a nivel nacional abre la puerta a la dimisión de Susana Díaz, aunque su ejecutiva regional la ha ratificado.

El día después de las elecciones autonómicas ha dejado claro que el panorama político andaluz no será fácil de despejar, ya que los diferentes actores quieren su papel protagonista y no están dispuestos a ceder ni a mostrar sus cartas desde el primer momento.

La dirección federal del PSOE ha abierto hoy la puerta a la dimisión de Díaz al frente de los socialistas andaluces si fuera necesario para garantizar la gobernabilidad de Andalucía, una posibilidad que ha cerrado la presidenta en funciones de la Junta, que ha recibido la confianza de le Ejecutiva regional del partido.

"Todos tenemos muy asumido que nuestro papel está subordinado al éxito de nuestro proyecto político y con generosidad todos estamos a disposición de la organización", ha dicho el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos.

Sin embargo, Susana Díaz, en una comparecencia ante los periodistas, ha sostenido que ha ganado las elecciones, que quiere formar gobierno y que habría dimitido si hubiera perdido.

Susana Díaz: "Lo más normal es que el tercero apoye al primero"

Susana Díaz: "Lo más normal es que el tercero apoye al primero"

Susana Díaz rechaza dimitir

La dirigente socialista no ha aclarado cuáles serán su preferencias en torno a los posibles pactos poselectorales, pero ha dejado claro que "lo normal es que el tercero (por Ciudadanos) apoye al primero (por el PSOE) y que lo demás es "extraño".

Además, ha reiterado que se pondrá en contacto con todos los partidos constitucionalistas, salvo con Vox, con el objetivo de impedir que el próximo Gobierno de la Junta de Andalucía dependa de la "extrema derecha".

La Ejecutiva socialista, con la presencia de los ocho secretarios provinciales, ha hecho balance de las elecciones, del escenario político que ha quedado y de las perspectivas para el PSOE y el futuro gobierno andaluz.

Después de señalar que más de un millón de andaluces ha apoyado a su partido, que ha ganado en unos 618 municipios y en siete provincias, Díaz ha reconocido que la de ayer fue una noche "triste" y que ha entendido el mensaje de los que se han abstenido.

"Ha habido muchas mujeres y hombres socialistas de corazón que fueron a votar. Algo hemos hecho mal. Tomamos nota para dar respuesta para estar a la altura, reflexionar y corregir los errores", ha planteado en un tono algo autocrítico.

Pese al mal resultado del PSOE-A, que ha perdido 14 escaños hasta quedarse en 33 representantes en el Parlamento, la secretaria general de los socialistas andaluces cree que su obligación como presidenta en funciones es "parar la ola de la extrema derecha" e impedir que el futuro gobierno de la Junta dependa de Vox.

Por ello, tiene la intención de abrir el diálogo con todos los partidos, salvo con Vox, para frenar a la "extrema derecha", de la que ha alertado que pretende "quebrar" la convivencia, no respeta la igualdad, la Constitución, el Estado de derecho y el Estatuto de Autonomía.

La candidata socialista, preguntada por si ha pensado en dimitir, ha indicado que, si hubiera perdido, lo habría hecho, pero ha insistido en que ha ganado las elecciones y ha sostenido que es llamativo que quienes han perdido los comicios, por el PP y Cs, "señalen" a los que han ganado.

A partir de aquí, ha esgrimido que todos los partidos constitucionalistas tienen ahora la "responsabilidad" de evitar que el futuro gobierno dependa de Vox y ha apostillado: "Yo no voy a hacer dejación de mis funciones".

Mientras, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha evitado hacer declaraciones en Polonia sobre el resultado, y su único comentario público al respecto ha sido un tuit en el que se ratifica en su proyecto político frente al miedo.

El líder del PP andaluz, Juanma Moreno, ha instado a la socialista a que no se agarre a "un clavo ardiendo" buscando "pactos imposibles" porque su tiempo en Andalucía "ha pasado", y ha pedido a Ciudadanos y a Vox que no estén pensando en "cálculos electorales" y se avengan a pactar con él.

Moreno confía en "entenderse" con Ciudadanos porque los andaluces "no perdonarían un ejercicio de tacticismo político o de ombliguismo" y también considera que están capacitados para llegar a "un punto de encuentro" con Vox.

En esa misma línea, el líder del PP, Pablo Casado, ha reclamado a los demás partidos que no busquen algún tipo de "geometría electoral variable" para evitar que sea su partido el que lidere el cambio.

{C}{C}

Casado reclama a Sánchez elecciones de inmediato

Casado reclama a Sánchez elecciones de inmediato

Pablo Casado pide que el PP lidere el cambio en Andalucía

Por su parte, el secretario general de Cs, José Manuel Villegas, ha pedido al PP y al PSOE que sean "responsables" y no bloqueen un cambio en Andalucía, aunque en última instancia, si no hay un acuerdo, no ha descartado "ningún escenario", incluida la opción de Vox, para que gobierne el candidato naranja, Juan Marín.

Cs pone sobre la mesa un gobierno en solitario con apoyo del PP y del PSOE y solo cierra la puerta a la posibilidad de que gobiernen los socialistas.

El candidato de Ciudadanos, Juan Marín, ha emplazado a Díaz a plantearse "poder apoyar" un gobierno de su partido, al que tras los resultados electorales ve "legitimado" para presidir Andalucía.

Ante la posibilidad de un pacto, el presidente de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado que su formación "nunca" va a ser un "obstáculo" para que haya en Andalucía una mayoría alternativa y ha recalcado que, si depende de ellos, se acabará con el "régimen de corrupción y clientelismo que representa el PSOE".

El líder de Vox promete ser la llave del cambio

Por su parte, Adelante Andalucía considera que han "resistido" pero no han "cumplido" y ha descartado cualquier tipo de pacto con otras fuerzas políticas porque el escenario actual es que Ciudadanos y el PP diriman "quién gobierna con el apoyo de Vox".

Anticapitalistas, la corriente de Podemos a la que pertenece la líder andaluza Teresa Rodríguez, ha exigido a la dirección de Pablo Iglesias que desconvoque las primarias para elegir las listas a las elecciones generales y acometa una "reflexión critica urgente" tras el resultado de los comicios andaluces.

Militantes críticos con la actual dirección de IU consideran que los resultados de las elecciones andaluzas demuestran el "fracaso" de la estrategia electoral del líder de IU, Alberto Garzón, al que han pedido que asuma responsabilidades y ponga su cargo a disposición del partido.