La preocupación de los españoles por la situación política se ha incrementado en el último mes y sitúa a los políticos como el segundo problema que existe actualmente en España, solo por detrás del paro y, por primera vez, por delante de la corrupción, según el último barómetro del CIS.

El sondeo, que se elaboró entre el 1 y 11 de noviembre, antes del comienzo de la campaña electoral en Andalucía, sube a los políticos al segundo puesto entre los problemas más citados por los ciudadanos, al nombrarlo el 31,2 por ciento de los encuestados, cuando un mes antes lo nombraban el 27,8.

Por delante de los políticos, el paro sigue siendo el principal problema para el 58,5 por ciento de los encuestados, aunque baja 1,3 puntos, y la corrupción pasa al tercer puesto, al mostrar preocupación por ella el 29,4, un punto menos que en el barómetro de octubre.

Crece la inquietud por los problemas de índole económica, que se mantienen en el cuarto puesto con un porcentaje del 22,4 por ciento, cuando hace un mes era la principal preocupación para el 21 por ciento de los ciudadanos.

La sanidad recupera, al ser citada por el 10,8 por ciento de los ciudadanos, el quinto puesto que perdió hace un mes, y deja en el sexto a la independencia de Cataluña, por la que la preocupación cae dos puntos y medio al situarse en el 9,7 por ciento frente al 12,2 de hace un mes.

Suben los problemas relacionados con la calidad del empleo, que pasan del 7,3 al 9,4 por ciento, y los de índole social, que suben en noviembre hasta el 9,2 por ciento frente al 7,4 registrado en octubre.

La educación se sitúa como la décima preocupación para el 8,5 por ciento, casi igual que un mes antes, seguida de las pensiones (6,8 %) y la inseguridad ciudadana (3,9 %).

Mejor percepción de la economía

En este nuevo barómetro ha mejorado la percepción sobre la situación económica, que no obstante consideran mala o muy mala el 51,6 por ciento frente al 55,2 de octubre, así como sobre su futuro, ya que ahora el 26,2 piensa que será peor cuando hace un mes lo creía el 27,6 por ciento.

También crece el optimismo sobre la situación política, ya que a pesar de que la consideración sigue siendo mala o muy mala para el 70,7 por ciento, en octubre ese porcentaje era superior en más de dos puntos (73,4 %).

Sin embargo, piensan que será aún peor en el futuro el 27 por ciento, frente al 26,8 por ciento de hace un mes.

Solo el 4 por ciento califica de buena o muy buena la situación política, algo más de que los que así opinaban en octubre (3,7 %), mientras que el 20,1 por ciento la consideran regular, igual que un mes antes.

En cuanto al futuro, el porcentaje de optimistas sube: ahora el 15 por ciento opina que la situación mejorará, frente al 13,8 por ciento en octubre, y un 39,4 por ciento augura que será igual, un 40,3 en el sondeo anterior.

El 5,6 por ciento de los encuestados califica de buena o muy buena la situación económica (4,7 % en octubre), mientras que un 42,2 por ciento cree que es regular (39,5 % hace un mes).

Y sobre el futuro, el 17,7 por ciento opina que la economía mejorará frente al 16,8 por ciento de octubre, y se mantiene prácticamente igual los que consideran que será igual, ya que los que piensan así son un 39,5 por ciento, cuando en octubre eran el 39,9 por ciento.