Los controles de acceso por parte de la Guardia Civil a los municipios de Íscar y de Pedrajas de San Esteban (Valladolid) comenzaron sobre las 11.30 horas de este domingo después de que un juzgado autorizase un plan de contención para los próximos catorce días en ambos municipios, con un total de 9.500 habitantes, por un brote de coronavirus.

En concreto el primer control se estableció en Pedrajas y, según ha informado a Efe la Delegación del Gobierno en Castilla y León, en el dispositivo de control estarán un total de 18 efectivos de la USECIC (Unidad de Seguridad Ciudadana Comandancia) y todos los del puesto de Íscar, y mañana llegarán refuerzos de otras provincias.

Además, estarán también varias patrullas del destacamento de tráfico y un helicóptero, según han apuntado las mismas fuentes.

Distantes entre sí cinco kilómetros, esta localidades tienen restringida la libre entrada y salida de personas de los municipios, salvo desplazamientos que se produzcan por motivos justificados, aunque la circulación por carretera y viales que transcurran por dichas localidades estará permitida, siempre que tengan origen y destino fuera de ellas.

Se permite la circulación de personas residentes, si bien se desaconsejan los desplazamientos y las actividades no imprescindibles, además se suspenden las visitas en los centros residenciales de personas mayores y las salidas de los residentes al exterior.