Los contagios y las muertes por coronavirus siguen al alza. Los casos diagnosticados han superado la media diaria de tres mil en la última semana, con un aumento del 53% respecto a la anterior, mientras el número de fallecidos casi se ha triplicado, de 26 a 65, en el mismo período. A pesar de estas cifras, el Gobierno confía en que las medidas que están tomando las comunidades autónomas consigan "reducir la transmisión al mínimo posible antes de la vuelta al trabajo y el inicio del curso escolar", según una nota hecha pública este lunes por Moncloa tras una videoconferencia celebrada por Pedro Sánchez con los máximos responsables del Ministerio de Sanidad.

"Se está trabajando en la dirección adecuada. El Plan de respuesta temprana se está aplicando y está funcionando, con el objetivo de anticiparnos al otoño y al invierno", sostiene Moncloa en su nota. En esta se asegura que la detección precoz a través de las pruebas PCR (47.300 al día), el aislamiento de los infectados y sus contactos y los confinamientos parciales a nivel local, están surtiendo efecto.

Cataluña mejora

Una horas después, Fernando Simón, en la misma línea, destacó que Catalunya, uno de las zonas más comprometidas, ya está "en fase de suave descenso", mientras que el otro punto negro, Aragón, ya se está estabilizando, aunque todavía no ha llegado al pico de contagios. Euskadi y Navarra "han reducido progresivamente su nivel de transmisión", aunque "han parecido algunos brotes en Andalucía".

Los últimos datos revelan que se ha pasado de 1.895 casos dignósticados en los siete días anteriores al lunes de la semana pasada a los 3.185 de ayer. La media diaria es una estadística mucho más fiable que la del número de casos diagnósticados en las 24 horas anteriores porque alrededor de la mitad de estos se notifican con retraso. Ayer fueron solo 1.486. La suma total acumulada alcanza los 322.980 infectados que mantienen a España en la cabeza de Europa Occidental.

Semana decisiva

Esta semana será decisiva para comprobar si las medidas están siendo realmente efectivas y no aparecen rebrotes en otra comunidades hasta ahora menos afectadas. Esta segunda ola, si se la quiere llamar así, es aún pequeña pero si va a más será complicada de controlar, según coinciden los expertos, que auguran un otoño difícil. También podrá comprobarse si el número de muertes y hospitalizaciones sigue en ascenso y se empieza a tensar algún sistema hospitalario.

En la comunidades más afectadas cunde el nerviosismo, especialmente en Aragón, con Zaragoza como el gran problema. El Clínico de la capital aragonesa ha empezado a despejar un párking al aire libre para destinarlo a hospital de campaña que montará el Ejército por su fuera necesario. De los 65 muertos de la última semana, 38 corresponden a Aragón, donde está empezando a resultar afectada la población más anciana.

A la queja del presidente aragonés, Javier Lambán, de que no tiene instrumentos jurídicos para confinar Zaragoza si fuera necesario, Simón le respondió que el Estado puede aplicar el estado de alarma a territorios delimitados. Según Simón, la situación está lejos de hallarse en ese punto, pero si "llegara a superar las capacidades de la comunidades autónomas, se aplicarían las medidas que tuvieran que aplicarse".

Sí al informe independiente

Simón aprovechó su comparecencia para responder a los 20 científicos de prestigio firmantes de la carta de 'The Lancet' que "es obvio" que España va a impulsar una investigación independiente sobre las actuaciones llevadas a cabo durante la pandemia, como lo van a hacer todos los países, pero no puso fecha.

El director del CCAES argumentó que no es fácil reunir el grupo de profesionales con el perfil adecuado, dado que los extranjeros "están inmersos en el trabajo en su propio país" y también porque los españoles que están trabajando en los equipos de las administraciones deberían restarle "mucho tiempo" a su dedicación para colaborar con el informe.