El aumento de casos de coronavirus, más de 19.000 nuevos desde el viernes y 2.060 en las últimas 24 horas, ha llevado a las comunidades con mayor número de brotes a tomar medidas más drásticas para evitar las reuniones sociales, consideradas ahora el principal foco de la expansión de la pandemia.

Murcia ha limitado este lunes las reuniones a un máximo de seis personas, Cataluña a un máximo de diez, y Madrid pide que no se celebren porque son un foco de contagios, y hay que revertir la situación antes de que los niños vuelvan a clase en septiembre de manera presencial.

"Hay un cierto nivel de transmisión comunitaria en toda España", tal y como ha reconocido Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, quien ha pedido un esfuerzo por parte de todos para reducirla y que sea "lo suficientemente baja" como para que la vuelta al colegio "no sea un problema".

Sube la transmisión en toda España y lo hace también en las residencias de ancianos, que acogen a la "población más frágil" y donde se encuentra el 7,3% de los brotes, con un promedio de catorce casos, aunque hay ocho o diez con un número importante de afectados que distorsiona ese porcentaje, ha dicho Simón.

Cataluña ha prohibido en todo su territorio las reuniones de más de diez personas, tanto en el ámbito público como privado, exceptuando el laboral y los transportes, porque un 70% de los contagios que se están diagnosticando se originan en reuniones sociales, familiares o con amigos.

Lo ha dicho el presidente de la Generalitat, Quim Torra, quien ha avanzado medidas más restrictivas de reducción de aforo en cuatro localidades barcelonesas (Terrassa, Granollers, Les Franqueses y Canovelles) y ha pedido un "nuevo esfuerzo" a los catalanes, porque "en las próximas tres semanas nos jugamos prácticamente todo lo que pasará en otoño e invierno".

Murcia también limitará las reuniones de ocio y familiares, ya sean en espacios públicos o privados, a seis personas si no son convivientes. El Gobierno regional reduce además a 30 el aforo de bodas, bautizos y comuniones mientras que los velatorios solo podrán tener 15 personas en espacios cerrados o 25 si son al aire libre.

La Región de Murcia tiene una incidencia acumulada por debajo de la media nacional, pero hay municipios que han duplicado los porcentajes de afectados, como Lorca, Murcia, Alhama de Murcia, Abarán y Fuente Álamo, en los que se tomarán medidas adicionales.

Madrid rechaza un confinamiento total

La Comunidad de Madrid pide a sus ciudadanos que eviten "interacciones sociales innecesarias" como reuniones sociales o familiares, pero rechaza la vuelta a un confinamiento que limite la actividad económica y el trabajo.

Fernando Simón ha explicado que Madrid está ahora en la situación por la que han pasado otros territorios desde el fin del estado de alarma, como Aragón, Cataluña o el País Vasco, y se ha mostrado convencido de que "en los próximos días" controlará la transmisión.

"El único problema con Madrid es que las cosas se tienen que hacer deprisa, porque está evolucionando rápido", ha advertido Simón, quien, sin embargo, ha hecho también hincapié en que el Gobierno regional está realizando "todos los esfuerzos" en colaboración con el Ministerio de Sanidad.

Entre ellos, el control de la movilidad en Tielmes, el primer municipio de la Comunidad de Madrid donde la alta tasa de contagios ha llevado a ordenar el cierre de bares y restaurantes y a recomendar salir de casa lo menos posible.

Las PCR que realizan las comunidades volvieron a aumentar la semana pasada, un 9% más que la anterior, y llegaron a los 5,8 millones de este tipo de pruebas diagnósticas realizadas desde el principio de la pandemia.

Los asintomáticos, el 60%

La capacidad de diagnóstico es "muy importante", insiste Simón, lo que explica en parte el incremento de contagios. El porcentaje de asintomáticos sigue en torno al 60% y la edad media de los afectados ha bajado hasta los 35 ó 36 años.

España ha efectuado en total 8.517.446 pruebas diagnósticas de Covid-19, de las que 5.849.939 fueron PCR, 2.205.074 test rápidos de anticuerpos y 462.433 pruebas de test serológicos.

Esta oleada de brotes, ha explicado Simón, se inició con el fin del estado de alarma, el pasado 21 de junio, y el incremento de la movilidad por las vacaciones.

"Dicho eso, es cierto que de alguna manera tenemos que recuperar nuestra vida y aprender a convivir con el virus", ha asegurado Fernando Simón, asumiendo los riesgos asociados a esa movilidad o a volver al trabajo y a los colegios.